DEPORTES
Delgado lo tiene de hijo a River
El del domingo no fue el primer tanto trascendental que el delantero le anota al clásico rival. Abbondanzieri, en duda.
La euforia de los hinchas de Boca se prolongó ayer tras la victoria sobre River en el superclásico con el recuento de los goles decisivos que Marcelo Delgado, uno de los veteranos del equipo de Jorge Benítez, le convirtió a River en los últimos años, tantos que sirvieron para concretar sendas victorias o para asegurarlas. Delgado se entrenó a la par de sus compañeros, ayer por la tarde en Casa Amarilla, preparando el partido de vuelta de los octavos de final de la Copa Libertadores, el jueves ante el Junior de Barranquilla; River también se entrenó ayer con miras a su compromiso ante la Liga Deportiva Universitaria, que ayer llegó a Buenos Aires.
Los fanáticos de Boca hacían ayer la siguiente lista:
- El 24 de mayo de 2000, Delgado abrió la cuenta en el partido de ida de cuartos de final de la Copa Libertadores, en la Bombonera, que Boca terminó ganando 3-0.
- Marcó los dos tantos con los que Boca ganó 2-1 el superclásico del Apertura 2002, en el Monumental, cuando el entrenador era Oscar Tabárez.
- En un torneo de verano, en el 2003, en Mar del Plata, marcó uno de los tantos con los que Boca goleó 4-0 a su tradicional rival, que terminó suspendiéndose por incidentes en la tribuna.
- El que marcó el domingo, sellando la victoria en un partido que parecía decididamente empate.
“Ganamos el superclásico por la concentración, por las atajadas de Abbondanzieri y porque el Chelo Delgado entró justo para meter ese golazo”, coincidió Claudio Morel Rodríguez, uno de los titulares con que Boca ganó el domingo.
El arquero sufrió una distensión del isquiotibial izquierdo y está en duda para jugar ante el Junior, aunque afirmó que su intención es ser de la partida. Ayer no participó de los entrenamientos.
Morel Rodríguez aseguró que lo que más preocupó a su equipo “fue que ellos tuvieran tanto tiempo el dominio de pelota. Ese fue nuestro principal problema, porque River es un equipo que si se le permite el manejo de la pelota puede hacer mucho año con jugadores que son muy talentosos”, explicó el zaguero paraguayo.
Morel Rodríguez admitió un quedo defensivo en la jugada que permitió a River establecer la igualdad transitoria “con un volante como Lucho González que llega seguido a situación de gol. Nos sorprendió y convirtió, porque aprovechó un quedo nuestro. Yo no sé si la tocó (Rolando) Schiavi, pero me tapó la pelota, no la vi venir”, graficó el defensor.
“Este clásico se caracteriza porque dura quince días: se juega desde una semana antes hasta una semana después –reflexionó el zaguero–. Es lindo estar en el bando de los ganadores, como nos toca ahora a nosotros, pero igual no podemos detenernos mucho porque ya estamos pensando en la revancha de la Copa con el Junior”, añadió.
“Todavía faltan noventa minutos y venimos de un empate, no de ganar. Con el Junior también el tema va a ser la pelota porque, como todos los equipos colombianos, si se la dejan la saben usar, aunque sea a un ritmo lento. Tenemos que jugar a la velocidad que le conviene a Boca.”
Los titulares ante River hicieron una práctica liviana, mientras que los que no jugaron fueron más exigidos por el PF Aquino.