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Serena venció a Venus en la final de Roland Garros. Un coche de la marca, manejado por Juan Pablo Montoya, fue el más veloz en la clasificación del Grand Prix de Canadá de Fórmula 1, que se corre hoy. Williams, el apellido, la familia, la marca, resultó ayer sinónimo de éxito.
Serena Williams ganó 7-5, 6-3 a su hermana Venus en un partido sin brillo. Venus fue apenas una sombra de lo que se había visto hasta ahora en el Grand Slam parisino, en el que no había perdido ni un solo set en el camino hacia la final, contra dos de Serena. Esta vez, Serena consiguió en una hora y media su segundo Grand Slam –una victoria “agridulce”– y “vengó” la derrota que sufrió ante Venus en la final del US Open del año pasado. Dos españoles, Juan Carlos Ferrero y Albert Costa, jugarán hoy la final masculina de Roland Garros.
Al igual que en los días previos a la final, las Williams minimizaron las complicaciones que presentan enfrentarse a una hermana en la final de un Grand Slam. “(Jugar contra Serena) no es muy diferente, porque ella es una de las mejores jugadoras del mundo”, dijo Venus tras la derrota. “Ustedes (la prensa) tienen más dificultades que nosotras para descubrir que estamos ahí sólo para jugar un partido”, señaló por su parte Serena. “Para nosotras, sólo se trata de un partido. Yo quiero ganar, y sé que Venus quiere ganar, como siempre. Eso es todo”, sentenció.
Serena achicó la diferencia en el historial de los enfrentamientos con su hermana. Ahora lleva una ligera desventaja de cuatro victorias contra cinco derrotas, pero ha sido la ganadora en los últimos tres choques, incluyendo la polémica semifinal de Indian Wells. En aquella ocasión, Venus no se presentó al partido, desatando una ola de rumores nunca probados sobre la presunta influencia del padre, Richard, en el resultado de sus partidos.
Esta vez, Serena se encargó de aclarar que el padre se mantuvo al margen. “Hablé con él antes del partido, y sólo nos dijo que nos divirtamos y salgamos a disfrutar.”
En Montreal, el colombiano Montoya hizo correr a su Williams mucho más rápido que la Ferrari de Michael Schumacher y le arrebató la pole-position para la carrera de hoy, a 70 vueltas, que se larga a las 14 (televisa Fox). Montoya marcó 1m12s836, y postergó al alemán, que señaló 1m13s018. El brasileño Rubens Barrichello (Ferrari) partirá de la segunda fila junto a Ralf Schumacher (Williams).
“Estoy muy satisfecho por haber obtenido la pole –dijo Montoya– El auto estaba en muy buenas condiciones y los neumáticos jugaron un rol muy importante. Creo que el uso inteligente de las cubiertas y la estrategia en la carrera son los ingredientes claves para el éxito en la competencia”. El jueves, Schumacher no se había equivocado cuando declaró a su llegada a Montreal: “sólo los Williams podrán vencernos”.