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Raúl Alfredo Cascini es la primera incorporación de Boca para la temporada 2002/03, a préstamo por un año y con opción de compra, y anoche viajó a Estados Unidos para sumarse al plantel que conduce Oscar Washington Tabárez, de pretemporada en ese país. Boca permanecerá allí por lo menos hasta el martes, cuando jugará contra el América de México en Houston, pero no está definida la fecha del retorno.
Alberto José Márcico, ayudante de campo de Tabárez, fue quien recomendó la contratación de Cascini, destinado a ocupar el puesto de volante central que dejó libre el colombiano Mauricio Serna, transferido al Puebla de México. Cascini, que tiene 31 años, fue compañero de Márcico en el Toulouse, de Francia, y no dudó en aceptar la propuesta.
Ahora, el interés de Boca es contratar un delantero. Las tratativas por Ernesto Farías, al que también pretende Independiente, se enfriaron, y los dirigentes irán a la búsqueda del paraguayo José Luis Cardozo. El vicepresidente segundo, Gregorio Zidar, se reunió con el representante del jugador, Claudio Luna, ofreciéndole 900 mil dólares por un año a repartirse entre el futbolista y el Toluca de México, donde el paraguayo gana 1,2 millón de dólares anuales. Boca le habría asegurado, además, una vivienda en un barrio privado para garantizar su seguridad, una de las condiciones que el paraguayo habría exigido para residir en Argentina. “Cardozo sigue queriendo jugar en Boca y se quedó mal la otra vez cuando finalmente el club decidió incorporar a (Abel) Balbo”, aclaró ayer Luna.
Si el pase no prospera, Boca volvería a la carga por Farías o insistiría en repatriar a Roberto Sosa, actualmente en el Udinese, al que en su momento quiso canjear, en una operación triangular, por Oscar Córdoba, prestado al Perugia y ahora en el Besiktas turco. Sosa fue liberado por el Udinese para buscarse club, por lo que la chance de un desembarco en Boca no está descartada.
Los dirigentes reanudaron las conversaciones con Diego Cagna, quien quedó libre del Villarreal. El volante pidió que lo esperen una semana para responder porque su esposa no quiere regresar a la Argentina y tiene una oferta de un club mexicano para contratarlo. Además, en caso de que se concrete la venta de José María Calvo al Feyenoord de Holanda a cambio de 2 millones de dólares, los dirigentes intentarán conseguir el préstamo de Hugo Ibarra, en el Porto, ofreciendo 400 mil dólares por un año.