Una cosa quedó clara tras las caídas consecutivas ante Belgrano y Lanús, que le quitaron la posibilidad de obtener el tricampeonato y lo enviaron a disputar la final con Estudiantes: el modelo futbolístico del DT Ricardo La Volpe colapsó de la peor manera. El lugar que le queda tras el naufragio, lejos está de corresponderse con la historia de ese club, algo que los propios referentes del plantel se han encargado de remarcar en las últimas horas y eso cuenta como valor agregado para este encuentro definitorio.

Boca dejará hoy en el hotel todas las innovaciones tácticas que los jugadores no entendieron o no supieron interpretar. Por eso no es descabellado otorgarle un plusvalor al hecho de que Estudiantes se enfrente más al Boca de los jugadores, al del modelo exitoso de Basile, el de la línea de cuatro atrás, que al que pergeñó el ex técnico de México con cinco defensores que simulan ser tres. Así no será tan fácil para los platenses traspasar la muralla defensiva boquense. La Volpe considera que Maidana puede tomar mejor que Silvestre a Pavone, sólo un detalle dentro de una cuestión de fondo.

También el peso de la experiencia en este tipo de partidos jugará a favor de los boquenses. Porque más allá de la confianza que desplega Estudiantes, habrá que ver cómo encara el partido y si soporta la presión de ir a buscar el resultado. Boca ha demostrado con creces sus dotes en la materia, tanto en el ámbito local como en el internacional: sobra con recordar sus partidos ante Real Madrid y Milan, o varias de las finales disputadas por la Copa Libertadores, como aquella en la que llegó de punto a Brasil a jugar ante el Palmeiras de Scolari y regresó con la gloria.

Además, se descuenta un extra en el rendimiento de jugadores de la talla de Gago y Palacio. El primero, que ayer no se entrenó para cuidarse físicamente, jugará probablemente su último encuentro con la camiseta boquense: ¿qué mejor oportunidad para revertir varios de los errores que cometió en las últimas fechas? El segundo tendrá una inmejorable oportunidad para terminar de convertirse en ídolo boquense y, se sabe, cuando él se enciende las defensas se enloquecen.

Rodrigo Palacio.

Gago no participó ayer de la práctica que el equipo realizó a puertas cerradas y luego fue revisado por el cuerpo médico, que le recomendó reposo hasta el comienzo del partido.

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Mañana, independientemente del resultado de la final, se definiría el pase de Gago al Real Madrid. La dirigencia de Boca aceptaría la oferta de 20 millones de euros que ofrecieron los españoles.

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Dos dudas tiene La Volpe para encarar el partido: el ingreso del juvenil Maidana por Silvestre, y si incluye o no un tercer delantero, Barros Schelotto en lugar de Marino. Ledesma entrará por Calvo.