Sábado, 21 de abril de 2007 | Hoy
DEPORTES › PEPE SANTORO, FLAMANTE DT DE INDEPENDIENTE
El preparador de arqueros que aceptó el reto de dirigir al menos hasta junio al primer equipo del Rojo, para sacarlo de la crisis y clasificarlo a alguna de las copas internacionales. Sus planes inmediatos.
Por Leonardo Castillo
Recuperar anímica y futbolísticamente a un plantel alicaído por los malos resultados que obtuvo en el Clausura y lograr la clasificación a las copas Libertadores y Sudamericana parecen, a simple vista, desafíos demasiado exigentes para un interinato. Pero Miguel Angel Santoro, “un hombre del club”, aceptó el reto de dirigir a Independiente tras la salida de Jorge Burruchaga con el objetivo de superar el mal momento que atraviesa el equipo y alcanzar esas metas. A horas de haber asumido, el ex arquero charló con Página/12 y se refirió al mal momento que atraviesa Oscar Ustari, la tensa relación que mantuvo con su antecesor y sus planes inmediatos. Además, aseguró que no le disgustaría que su reemplazante, después de junio, sea Carlos Bianchi.
–¿Cómo encontró al plantel?
–La verdad es que muy mal. Los noté muy afectados en la parte anímica, no encuentran respuestas para justificar lo que les pasó en esta parte del campeonato. Hablé con ellos de forma individual y colectiva. Vamos a tener que trabajar mucho en la parte psicológica para poder revertir esta situación. No será fácil, pero tenemos esperanzas de lograrlo. Creo que tenemos un plantel que no es inferior a ninguno de los otros que existen en Primera División. Así que tengo confianza.
–¿Pero qué explicación le encuentran los jugadores a esta mala campaña?
–Están muy confundidos. Pero lo que me dicen es que les cuesta mucho resolver situaciones adversas durante los partidos. Que se caen anímicamente cuando les marcan un gol. Y eso es algo visible. Vamos a tener que hablar mucho para templarles el ánimo.
–Y en lo futbolístico, ¿dónde piensa poner énfasis?
–Básicamente en poner orden en la defensa. Creo en eso de que los equipos se arman de atrás para adelante y en este caso hay que hacer lo mismo. Lo más importante es que el equipo deje de perder tan seguido.
–¿No le parece un discurso muy utilitario para el gusto del hincha de Independiente?
–Es que necesitamos resultados para ganar un poco de confianza. Después, cuando estemos un poco más ordenados, trataremos de jugar el fútbol que le gusta a la gente.
–Usted es entrenador de arqueros y trabajó con Oscar Ustari en las divisiones inferiores. ¿Cómo explica el mal momento deportivo que atraviesa?
–Creo que lo perjudicó mucho no seguir con el trabajo específico que venía haciendo con nosotros desde las inferiores. Pero tiene condiciones, una gran fortaleza anímica y se va a recuperar. Es un gran arquero y va a llegar muy lejos.
–¿Por qué cree que Burruchaga decidió separarlo a usted de su cuerpo técnico?
–No sé, habría que preguntarle a él. Pero a mí me dolió mucho. Trabajé con un montón de entrenadores y nunca tuve problemas con ninguno, esta fue la primera vez que me marginaron, pero ahora hay que mirar para adelante. No le guardo rencor a nadie.
–Más allá de esta actualidad, ¿le parece probable que este equipo pueda clasificar a las copas?
–Sí, tengo confianza en la calidad de este grupo de jugadores y, además, en el fútbol argentino está todo muy parejo y no se puede descartar nada. Llegar por lo menos a una de las copas es una de las metas que nos propusimos.
–La idea de la dirigencia es que su gestión concluya en junio, ¿pero existe alguna posibilidad de que usted sea ratificado en el cargo si hace una buena campaña?
–La realidad hoy dice que estoy hasta el final de este campeonato, eso me dijeron los dirigentes. Pero nunca se sabe qué puede pasar. A lo mejor... ¿Quién sabe?
–Para alguien que vivió la época dorada de Independiente, cuando el club se cansaba de ganar copas y campeonatos, ¿no es muy dura esta situación? ¿Cómo se pudo caer tan bajo?
–Durante mucho tiempo se hicieron las cosas muy mal y ahora lo estamos pagando. Pero no hay que perder la fe. Con Julio Comparada iniciamos una etapa de saneamiento institucional. Hay que poner las cosas en orden y después tratar de mejorar en lo deportivo. En Boca pasó lo mismo. Durante los primeros años de la gestión de Mauricio Macri sucedió lo mismo. En los primeros años no se ganaron títulos, después sí. Hay que tener paciencia.
–Boca empezó a ganar justamente cuando Carlos Bianchi asumió como entrenador. Ahora se rumorea que podría ser su sucesor. ¿Le gustaría?
–No sé qué pueda pasar dentro de dos o tres meses, no sé nada de eso; no tengo ni idea. Pero sería muy bueno que me suceda alguien como él. Lo conozco y tenemos una relación muy buena. Es un tipo muy capaz, que le puede hacer bien a Independiente.
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.