“Apuntamos a que San Lorenzo siga siendo competitivo, queremos pelear el campeonato y la Copa. Por eso necesitamos algunos jugadores más”. Ramón Díaz, técnico del último campeón argentino, transmite serenidad y no se desespera ante los movimientos del mercado de pases. “Estoy esperando por (Daniel) Bilos y (Bernardo) Romeo. Hay una pequeña diferencia, pero todo depende del presidente (Rafael Savino)”, aseguró el entrenador, quien en este semestre tendrá doble objetivo: el torneo local (debuta ante Newell’s, en Rosario) y la Copa Sudamericana (juega la primera fase ante Arsenal).

San Lorenzo deberá afrontar estos compromisos con la baja de Ezequiel Lavezzi, vendido al Napoli, y Cristian Ledesma, otro baluarte del campeón que ayer fue negociado al Olympiakos de Grecia. En cuanto a las incorporaciones, ya se sumaron el defensor Gastón Aguirre, proveniente de Newell’s, y el mediocampista Juan Manuel Torres, quien quedó libre en Racing. Además, terminaron sus préstamos y retornaron al club Jorge Ortiz (Arsenal) y Germán Herrera (Gremio). “Me gustaría traer un atacante más, un jugador que vaya por afuera, para tratar de suplir a Lavezzi)”, dijo el entrenador.

Otras caras nuevas para esta temporada serán las de Michael y Emiliano Díaz, los hijos del entrenador, quienes realizaron la pretemporada con el plantel y serán tenidos en cuenta por su padre. Michael tiene 21 años, es lateral derecho y jugó la última temporada en San Telmo; Emiliano, tiene 24, es mediocampista por derecha y llega de Platense. “Ojalá puedan jugar. Están trabajando a la par de todos. Me gusta que los jóvenes crezcan. Eso es lo que mejor hice como entrenador: preparar a los más chicos. Ya lo hice en River con (Javier) Saviola o (Andrés) D’Alessandro y ahora lo quiero hacer en San Lorenzo”, dijo el riojano.

El plantel de San Lorenzo continúa en México terminando su preparación de cara al Apertura. Esta semana jugará un nuevo amistoso ante Jagüares de Chiapas y luego retornará a Argentina para comenzar el campeonato. Desde tierras aztecas, el técnico de San Lorenzo disfrutó del logro argentino en el Mundial Sub-20 y opinó: “Los vimos muy bien a los pibes, demostraron que el fútbol argentino tiene un futuro enorme. Lo más importante es que a la Argentina se la notó muy sólida, con personalidad”.