A poco más de un mes del comienzo del Mundial Gay de Fútbol que se disputará en la Argentina, el presidente de Deportistas Argentinos Gays (DAG) y director técnico del equipo nacional, Néstor Gamella, reveló todos los inconvenientes que tienen para llegar en condiciones al certamen: “No tenemos camisetas, hay algunos chicos que no pueden comprarse botines y no hay un solo médico para el plantel”. Además, criticó el accionar de la Comunidad Homosexual Argentina (CHA): “Para nosotros no existe. Es un grupo de pocas personas que no nos representa y sólo busca golpes de efecto”, y afirmó que nunca tuvo respuesta de la AFA cuando le pidieron colaboración: “La AFA no colabora con nadie”.

–A poco tiempo del inicio del torneo, ¿recibieron el aporte que solicitaron?

–La única colaboración que tuvimos fue de la Secretaría de Deporte de la Nación y de la Secretaría de Deporte de la ciudad de Buenos Aires, que nos facilitaron el alojamiento, pero eso para nosotros no es tan necesario. Después no tuvimos ninguna otra ayuda.

–¿Con qué cosas básicas todavía no cuentan?

–No tenemos camisetas, estamos usando las mismas hace diez años. Recién ahora arreglamos con una agencia de turismo para que ponga su marca en las mangas. Además, hay algunos chicos que no tienen botines. Ah, otra cosa: tampoco tenemos un médico para el plantel.

–¿Y si se lesiona un jugador?

–Tenemos que ver si tiene obra social, y si no, lo llevamos al Pirovano.

–¿Qué relación tienen con la CHA?

–La CHA es un grupo de pocas personas, que no está en contacto con gente gay a nivel masivo. Ellos no nos representan. Sólo buscan dar un golpe de efecto, como lo hicieron mandando un mail a AFA pidiendo colaboración para el Mundial. Ellos no tienen nada que ver con eso, lo hacen porque tienen un objetivo político. Jamás recibimos un subsidio del Estado, en cambio ellos sí, viven de eso. Para nosotros la CHA no existe.

–¿Qué diferencia hay entre el trabajo de DAG y el de CHA?

–Lo que nos diferencia es que nosotros hacemos un trabajo de base con los chicos. Nuestro objetivo es insertarlos en la sociedad y alertarlos sobre los peligros que pueden llegar a afrontar. La CHA, en cambio, es una Sociedad Civil, es menos importante. Nosotros hacemos algo más que organizar un carnaval por año.

–¿Por qué lo dice?

–Por la Marcha del Orgullo Gay. Eso es algo que había que hacer hace diez años, ahora ya no tiene más sentido. La gente lo toma mal, reacciona.

–Y en cuanto a la International Gay and Lesbian Football Association (Iglfa), ¿qué vínculo tienen?

–La Iglfa organiza el campeonato de manera independiente, se queda con todos los réditos, ya no los comparte con el país organizador. Nosotros en el Mundial no vamos a ganar plata, al contrario, vamos a perder.

–¿Intentaron hablar con la AFA para pedirle apoyo?

–La AFA no colabora con nadie. Mandamos un mail solicitando lugares de entrenamiento, porque hasta ahora, como no tenemos una cancha de once para entrenarnos, jugamos en una más chica y debemos alquilarla.

–¿Qué respuesta tuvieron?

–Ninguna. Llamé a todos los teléfonos, pero nunca me contestaron nada. Te doy un ejemplo: el 15 de septiembre tenemos programado un amistoso contra la Selección Gay de Uruguay y todavía no sabemos dónde lo vamos a jugar. Pedimos en AFA si podían gestionarnos jugar en la cancha de Excursionistas o en la de Defensores de Belgrano, y nunca nos contestaron. Seguramente vamos a tener que alquilar una.

–¿La sociedad evolucionó en el trato con los homosexuales?

–Creo que sí. Pero el tema es trabajar sobre la base, sobre los chicos. Si la familia no acepta al chico, va a buscar la noche, las adicciones. Nosotros pretendemos la aceptación social como algo natural. Si los jóvenes no se sienten marginados, no tienen que hacer conductas marginales. Como siempre digo: si todo este esfuerzo sirve para que aunque sea un chico se salve del sida, ya con eso estamos contentos.

Producción: Mariano Verrina.