En su segunda presentación en el torneo, River tampoco pudo encontrar la victoria en Jujuy, debido a que igualó en dos tantos ante Gimnasia, en el encuentro postergado de la primera fecha del torneo Apertura. El conjunto visitante mostró algo de lo bueno que exhibió en el segundo tiempo ante San Lorenzo, pero no le alcanzó para superar al ordenado equipo local, que venía de vencer a Racing en el mismo escenario.

Para este partido, el técnico de River, Daniel Passarella, decidió realizar algunos cambios posicionales en relación con el encuentro anterior. En primer lugar, Ferrari regresó luego de una suspensión, pero en este caso lo hizo por el lateral izquierdo, con el perfil cambiado. De esa manera, Ponzio se mantuvo por el otro lado de la defensa, con las incomodidades que eso le ocasiona, teniendo en cuenta que su lugar habitual es el de volante por la derecha.

Además, Ortega se retrasó unos metros para actuar de enlace y Rosales acompañó a Ruben en el ataque. Y si bien River salió a presionar en los primeros minutos y se acercó hacia el área de Valdiviezo, no pudo crear peligro serio. La falta de profundidad hizo que no pudiera generar situaciones claras para ponerse en ventaja. Mientras, los jujeños esperaban en su campo para salir rápido de contraataque y aprovechar la velocidad de Carranza y Miranda.

A pesar de esas posturas, no se concretaron acciones de riesgo y sólo River fue el que más se acercó, pero sus intentos eran con envíos desde los costados y con poca precisión para los que esperaban en el área.

En los últimos minutos del primer tiempo el partido tuvo mayor emoción. En esos instantes, Abelairas estuvo cerca de convertir, pero su remate fue rechazado por Valdiviezo. La jugada la inició Ortega por la derecha y luego enganchó para habilitar a su compañero que llegaba por el otro lado. La respuesta local llegó a través de Carranza, quien quedó mano a mano con Ojeda y le quiso levantar la pelota, pero el arquero le tapó el tiro.

El desarrollo había cambiado a partir de la movilidad de Ortega por el lado de River y de la presión que ejercía Miranda en el área rival. River volvió a estar cerca con un remate de Ponzio, en la salida de un tiro libre, pero Valdiviezo respondió bien. Finalmente, el gol visitante llegó a los 42 minutos a través de Rosales. El delantero recibió un pase largo de Ortega y, luego de parar la pelota con la derecha, definió de zurda, cruzado, para sorpresa del arquero.

La primera parte llegaba a su fin y Gimnasia estuvo cerca del empate con un zurdazo de Carranza, que Ojeda alcanzó a desviar con una mano. Y cuando se jugada el segundo minuto de descuento, Carranza tuvo su revancha y marcó la igualdad. El ex Chicago le pegó desde afuera del área, de zurda, por arriba del arquero.

El comienzo de la segunda parte siguió teniendo el mismo vértigo que el final del primer tiempo. Cuando apenas habían pasado cinco minutos, Carranza, de media vuelta, remató desde la derecha y tapó Ojeda, en la primera acción de peligro. Enseguida, Ojeda le ganó el duelo otra vez a Carranza, que remató luego de recibir la pelota de Ramasco.

Esa insistencia derivó en el gol de Pieters. El volante le dio de zurda, llegando por derecha, luego de una larga corrida, y colocó la pelota al lado del primer palo. Gimnasia estuvo cerca de aumentar la diferencia, pero Ponzio salvó justo cuando Carranza se preparaba para cabecear. En ese momento, Ferrari pasó a jugar por el lado derecho, pero más adelantado. Los desbordes por la derecha eran la mejor arma de River para atacar, y por esa vía llegó el gol del empate. El ingresado Zárate cabeceó la pelota al lado del palo, luego de un centro de Rosales.

En el final, Gimnasia estuvo más cerca de quedarse con el triunfo, pero Ojeda respondió bien dos veces: primero ante un cabezazo de Darío González y luego ante un tiro de Ramasco. El empate ya no se podía modificar.