“Soy el hombre más feliz del mundo. Estoy contento por mí, por mi familia y por mi país.” Con ese cabezazo insólito, Lionel Messi no sólo aseguró la conquista de la triple corona por parte del Barcelona sino, también, la victoria del rosarino en su duelo particular con el portugués Cristiano Ronaldo, entre los considerados dos mejores futbolistas del mundo. Aunque el mejor jugador de la final fue Xavi Hernández, el resultado hace presumir que, al cabo del año, Messi sea considerado el astro absoluto del fútbol mundial

Hasta ese gol de Messi, ninguno de los dos jugadores había brillado, aunque Cristiano Ronaldo se había mostrado más activo, sobre todo al inicio del partido. Con este título y su gol, Leo Messi ganó muchos puntos para hacerse en 2009 con el Balón de Oro y el FIFA World Player, que se llevó el portugués el pasado año.

El portugués se prodigó más al principio, y así, en el segundo minuto de partido, lanzó un tiro libre, que despejó con los pies el portero Víctor Valdés, pero el Manchester United no se pudo aprovechar en el rebote. En el minuto 7, intentó un tiro desde lejos, pero su disparo se fue por poco a la izquierda de Víctor Valdés.

Dos minutos después, de nuevo el portugués, en una jugada por la izquierda, lanzó dentro del área un disparo cruzado que pasó cerca de uno de los postes, en la mejor ocasión que dispuso. Ronaldo, más activo en esos primeros minutos, realizó una peligrosa incursión en el minuto 16 por la derecha que fue cortada con una obstrucción cerca del área por Gerard Piqué.

La primera aparición de Messi se dio en el minuto 20 con un peligroso disparo desde fuera del área, que se marchó rozando el travesaño. Volvería a acercarse peligrosamente al final del primer tiempo, con una incursión por la izquierda y un centro peligroso, que despejó Van der Sar con problemas.

El argentino protagonizó una jugada conflictiva en la reanudación, en el minuto 50, cuando pareció ser agarrado en el área por John O’Shea, al tratar de rematar un centro de Samuel Eto’o, en la que Messi cayó y reclamó penal.

Cuatro minutos después, hubo una tímida aparición de Cristiano Ronaldo, quien no se había dejado ver desde el primer cuarto de hora de partido, pero el portugués no llegó por poco a un centro desde la derecha de Wayne Rooney.

Tras el gol de Messi, Cristiano gozó de una buena oportunidad en el 72’, pero no pudo aprovecharse de un centro desde la derecha y cuando estaba cerca de uno de los postes, lanzó fuera. Para culminar la noche negra del portugués, recibió una tarjeta amarilla en el minuto 78 por una dura entrada a Puyol.