Desde Mar del Plata

Se viene el clásico ante Brasil, pero los jugadores argentinos tienen la idea fija: con la clasificación asegurada, el partido a ganar es el del sábado, que otorga el pasaje a Londres. “Siempre es lindo jugar con Brasil, pero no es el partido más decisivo. Lo será si nos cruzamos con ellos el sábado”, indicó Emanuel Ginóbili. Para Pablo Prigioni, que ayer igualó su mejor marca en la Selección con 20 puntos, el panorama es similar. “Nos quedan dos partidos para seguir mejorando”, señaló el base, que descartó que lo preocupara el duelo con Marcelo Huertas, el armador brasileño. “Si Huertas hace 20 puntos y nosotros ganamos por 10, yo me voy contento”, resaltó el cordobés. Para el entrenador Julio Lamas el cruce con Rubén Magnano no tiene ninguna connotación especial. “El único condimento que tiene el partido es que se trata de un clásico sudamericano con mucha historia. No tengo ningún duelo particular con Magnano y yo siempre priorizo lo colectivo por sobre lo individual”, señaló el entrenador argentino. No es especial, pero a partir del hambre de este equipo, no será un partido más este nuevo clásico.