La última y extraordinaria novela de Kazuo Ishiguro, Nunca me abandones, publicada en castellano, como toda su obra, por la editorial Anagrama, ha sido considerada por buena parte de la crítica como la culminación de su talento narrativo. Por intrincados e insólitos caminos, engañosamente evocadores de la ciencia-ficción, con una escritura minuciosa y de límpida belleza, el autor construye un paradigma en cierto modo tragicómico de la desolación humana cuya rara intensidad remite a otro de sus grandes libros, Los restos del día.

Ishiguro, nacido en Nagasaki, Japón, en 1954, y trasladado a Inglaterra con su familia en 1960, es hoy uno de los mayores escritores en lengua inglesa. Estudió filosofía y literatura en las universidades de Kent y East Anglia, y tras escribir cuentos y artículos para diversas revistas publicó en 1982 su primera novela, Pálida luz en las colinas, y en 1986 Un artista del mundo flotante; ambas obtuvieron importantes premios literarios. Los restos del día (1989) significó su resonante consagración: esta novela cosechó elogios unánimes por parte de la crítica, el Booker Prize y una excelente adaptación cinematográfica dirigida por James Ivory y memorablemente protagonizada por Anthony Hopkins.

A estos libros les siguieron Los inconsolables (1995) y Cuando fuimos huérfanos (2000); en 2005 publicó Nunca me abandones. También ha trabajado como guionista cinematográfico.