El ministro de Trabajo, Carlos Tomada, destacó que mientras que en la mayor parte de los países de Europa y América latina la tasa de desocupación se elevó como reflejo inmediato de la crisis mundial, “que primero fue financiera, luego económica y finalmente del empleo, Argentina, junto con Alemania, son los únicos dos países en los que la tasa no se incrementó” respecto del inicio de 2008. En base a otra estadística, elaborada por la propia cartera laboral, observó que el empleo registrado del sector privado se redujo levemente en el cuarto trimestre de 2008 y primero de 2009, pero todavía se ubica por encima del primer cuarto de 2008 y 36 por ciento por encima del piso del primer trimestre de 2003. “Es un descenso leve y tolerable en el contexto actual”, subrayó Tomada, quien además destacó que “el impacto de la crisis internacional logró atenuarse por las políticas de empleo que se aplicaron, por vía de medidas proactivas en favor de mantener el empleo en empresas en dificultades y la aplicación del procedimiento preventivo de crisis en conflictos donde se planteaban despidos masivos”. Señaló que en el 75 por ciento de los casos en que hubo una decisión inicial de despedir personal, se retrotrajo la medida. De todos modos, el ministro admitió que hay sectores en situación crítica en cuanto a la problemática laboral, como la industria metalmecánica, muy afectada por la caída en las exportaciones. “De los 70 mil Repro (subsidio a los salarios para reconversión productiva) asignados, unos 20 mil corresponden a ese sector”, ilustró Tomada.