El Ente Nacional Regulador del Gas instruyó ayer a las distribuidoras a que sigan facturando con el cargo que dio lugar a los últimos controvertidos aumentos, aunque facultando a los usuarios a que no lo paguen sin quedar por ello sujetos a ninguna penalidad. Las empresas analizan la posibilidad de emitir facturas con dos cupones, para que el cliente elija cómo pagar.

El fundamento de ese instructivo es una orden judicial que hizo lugar a una presentación formulada por la Defensoría del Pueblo de la Nación en la que se denunció la presunta inconstitucionalidad del cargo. La Justicia hizo lugar a una cautelar y lo suspendió hasta resolver la cuestión de fondo. Según la interpretación del Enargas, ese pronunciamiento no invalida la vigencia del decreto 2067/08 (creador de esa sobretarifa), pero permite a los clientes pagar con el cuadro tarifario anterior “a cuenta” de un importe definitivo.

En cualquier caso, las distribuidoras deberían refacturar para hacer los ajustes del caso cuando haya un dictamen judicial definitivo, que anule o ratifique el cargo. Esto está demorando la última emisión de facturas, correspondientes a los consumos de agosto y septiembre, cuando los usuarios sólo deben oblar un 30 por ciento del polémico cargo. Pero a partir del primer día de octubre, éste cobraría plena vigencia.