El secretario general de la CGT, Hugo Moyano, buscó desdramatizar el tono de las discusiones paritarias que están iniciándose. Entre las declaraciones de empresarios “que dicen que van a tener que cerrar sus empresas” ante las demandas salariales, y sindicatos que “por ahí lanzamos la amenaza de paro”, el dirigente camionero puso paños fríos afirmando que “es lo que ocurre siempre en la discusión salarial, es normal”, y confió en que finalmente se llegue a acuerdos. Más directo, Héctor Daer, secretario de Prensa de la misma CGT, señaló que “nosotros no vamos a ser tan imprudentes de generar una estampida inflacionaria, que después nos lleve a tener que negociar salarios todos los meses”, pero indicó que esto también implica “ir a una negociación libre, sin que se establezcan pisos ni techos”.

El titular de la CGT utilizó ayer un tono que pareció despejar los temores de tensiones políticas y sociales generadas a partir de las negociaciones paritarias. “La discusión salarial se está dando como normalmente se ha dado, va a ser como en años anteriores, con muchas presiones”. Y admitió que una complicación adicional es que “en algunos productos en particular hubo una inflación que no es normal, como en la carne”, y subrayó que “esto deberá contemplarse en la discusión salarial”.

Daer, a su vez, indicó que “cada uno de los gremios verá cuál es el parámetro que se acomoda a sostener el poder de compra del salario” y estimó que el 23,5 por ciento otorgado como aumento a nivel nacional al salario básico docente “podría ser un parámetro a tener en cuenta”, aunque no necesariamente un piso. Pero, a su vez, rechazó la postura de la Unión Industrial Argentina, pretendiendo “un techo del 15 por ciento” a las negociaciones salariales. El secretario de Prensa de la central obrera prometió “prudencia para no generar inflación”, pero a su vez exigió como condición negociaciones “libres, sin pisos ni techos”.