Los precios de los granos de la actual cosecha treparon hasta 20 por ciento respecto a los vigentes en la campaña anterior, según el Informe General de Coyuntura Agropecuaria (IGCA) que publicó ayer la Bolsa de Cereales. Sólo en julio último los aumentos oscilaron entre 8 y 22 por ciento respecto del mes previo. Este comportamiento le reportó excelentes niveles de rentabilidad al sector exportador de cereales y oleaginosas, sobre todo teniendo en cuenta que sus costos crecieron a un ritmo mucho menor, en torno del 10 por ciento interanual. En el mercado estiman que esta situación de tensión en los precios continuará a raíz de la decisión de los gobiernos de Rusia y Ucrania de suspender sus exportaciones.

En este contexto, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner participará hoy de un acto en la Bolsa de Comercio de Rosario. Ayer había expectativas de productores agropecuarios de que pudiera anunciar una segmentación de las retenciones a las exportaciones de granos, tal como reclama la Federación Agraria.

Con niveles record de cosecha, precios en alza y costos que no alcanzan a ponerse a la par de los ingresos, el margen de ganancia del sector parece inmejorable. De acuerdo con datos de la Bolsa de Cereales, la cosecha de maíz finalizó con 2,59 millones de hectáreas, en tanto que la de trigo es de 4,2 millones, un 93,1 por ciento por encima de la campaña anterior, afectada por la sequía.

A estos volúmenes se sumaron los incrementos en los precios. El trigo se encareció el mes pasado respecto de junio en el mercado a futuro 21,9 por ciento; el maíz, 9,1; y la soja, 8,3. Con respecto a la campaña anterior, hubo subas en los precios de 20,6 por ciento para el girasol; de 11,4 para el trigo; 10,5 para el maíz, y 7,1 para la soja.

Por su parte, los costos acompañaron con alzas inferiores a los aumentos en los precios de los respectivos productos, salvo en el caso de la soja que, no obstante, opera en sus máximos históricos. Contra la campaña anterior, los costos para soja se incrementaron 11,9 por ciento; para el girasol, 11,8; para trigo, 10,8; y maíz, 8,9. Con respecto de junio pasado, las subas estuvieron entre 0,1 y 0,3 por ciento.

La oferta de trigo se ve amenazada por la situación climática en Rusia y Ucrania. El Ministerio de Agricultura de Ucrania, país golpeado por la sequía, anunció que propondrá en el Consejo de Ministros una reducción drástica de las exportaciones de cereales. Esa cartera sostuvo que pretende reducir la exportación a 2,5 millones de toneladas de granos, además de otro millón que ya se encuentra almacenado en los puertos ucranianos en el Mar Negro. La previsión inicial era de entre 15 y 17 millones de toneladas. El primero en iniciar este tipo de medidas fue Rusia, que la semana pasada suspendió sus envíos, en primera instancia, hasta septiembre próximo.