Las acciones de la petrolera británica Desire Petroleum se desplomaron ayer en la bolsa londinense, tras el anuncio de otro fracaso en una nueva perforación que realizó en la zona de las islas Malvinas. “La calidad de la reserva es pobre, con una porosidad promedio de 13 por ciento”, señala un comunicado de la petrolera difundido en Londres. En el mismo texto agrega que “no se obtuvieron presiones válidas, lo que indica que la reserva tiene una baja permeabilidad en esta ubicación” y escasa posibilidad de ser explotada comercialmente. Tras conocerse esta noticia, las acciones comenzaron a desplomarse en la city londinense, alcanzando a media rueda una pérdida superior al 58 por ciento. La empresa informó que “tendrá que tapar y abandonar el último pozo” que acababa de perforar en las Malvinas, bautizado Ninky, el que permitió detectar “rastros de petróleo, pero de una calidad demasiado baja” para poder ser explotado.