Pese a que el acuerdo del sector distribuidor de combustibles con el sindicato camionero se alcanzó el viernes por la noche, quedando sin efecto la medida de fuerza implementada desde mediados de la semana pasada, hasta el día de ayer seguía sin normalizarse el abastecimiento. “Recién en el día de hoy (por ayer) se pudo alcanzar un ritmo de distribución a pleno, durante las 24 horas; el sábado se trabajó normalmente, pero al ritmo habitual de esa jornada, es decir que se distribuyó durante 16 horas, no como de lunes a viernes, que se trabaja las 24 horas. Con ese ritmo, entre sábado y lunes no se alcanzó a cubrir todo el stock faltante y la demanda acumulada por los automovilistas que no pudieron cargar en los días previos”, manifestó una fuente del sector petrolero. La situación comenzaría a normalizarse a partir de hoy, aseguran.

Durante jueves y viernes de la semana pasada prácticamente quedó paralizada la provisión de combustibles en el área metropolitana y en varias ciudades importantes del interior. Ya el viernes por la tarde se observaban largas colas frente a los surtidores de las estaciones de servicio que seguían atendiendo, incluso en aquellas que sólo despachaban las naftas “premium”, porque aseguraban que la llamada “súper” o especial estaba agotada. El sábado por la mañana la escasez era evidente.

Mientras que a primera hora de la tarde del sábado el secretario adjunto del gremio de camioneros, Pablo Moyano, informaba que las medidas de protesta habían quedado sin efecto, en las estaciones de servicio seguía escaseando el producto. El desabastecimiento de los días previos no fue cubierto por la distribución del sábado, y con el consumo del domingo volvieron a agotarse las existencias en varias estaciones de servicio del área metropolitana. Ese día, como es habitual, no hubo distribución de combustible.

Desde una de las empresas petroleras que refinan para el mercado interno aseguraban que ayer fue “otra jornada de fuerte concentración de demanda, por los automovilistas que no pudieron cargar en días anteriores”. Nuevamente se produjo una situación de marcado desfasaje entre oferta y demanda, repitiendo el escenario de largas colas o surtidores con las mangueras cruzadas.

Con la carga de combustibles de anoche y a partir de la paulatina “vuelta a la normalidad en la demanda”, las empresas refinadoras confiaban en que durante la jornada de hoy se observaría un regreso al equilibrio. “Para nosotros, ya está normalizada la oferta”, manifestó el vocero de una de las firmas líderes del sector, a partir de la distribución programada para la noche de ayer a hoy. “Si hay algún faltante mañana (por hoy), será sólo por algún problema puntual”, agregó la misma fuente.

La demora en la normalización del abastecimiento ya había dado lugar a controversias entre distintos eslabones de la cadena. Luis Malchiodi, de la Unión de Expendedores de Nafta, les había imputado a las petroleras “no tener voluntad para que se cumpliera con el abastecimiento a las estaciones de servicio”. Fue en horas de la mañana, cuando desde varias provincias se reportaba la falta de combustible en las principales bocas de expendio.