ECONOMíA › EN LA CITY HUBO DEPRESION: BAJARON LAS ACCIONES UN 8,6 PROMEDIO
Hubo lágrimas por un sueño frustrado
Los financistas habían “comprado” las encuestas de Ricardo López Murphy en el ballottage y la de Carlos Menem amplio triunfador. Pero el resultado fue otro y entonces los financistas se desilusionaron. Cayeron acciones y bonos. El dólar bajó a 2,88 pesos.
Por Claudio Zlotnik
Los financistas habían apostado fuerte y perdieron. Ricardo López Murphy quedó afuera de la segunda vuelta y en la city creen que Néstor Kirchner, y no Carlos Menem, aparece como el de mayores chances para recibir la banda presidencial. El impacto en el mercado fue inmediato: ayer, las acciones retrocedieron 8,6 por ciento en promedio mientras que los títulos públicos perdieron hasta 4,5 por ciento. En el recinto bursátil había desazón por los resultados, y los corredores recibieron órdenes de venta desde bien temprano, antes de que se abrieran los negocios. Por el contrario, el mercado cambiario estuvo calmo y el dólar bajó dos centavos.
No es la primera vez que los inversores le bajan el pulgar a un candidato. Ocurrió hace 14 años, en mayo de 1989, cuando las acciones bajaron 6,5 por ciento porque Carlos Menem había ganado los comicios presidenciales. Por entonces, en la city existía el “miedo a Menem”. Un temor que se disipó apenas semanas más tarde, cuando el justicialista se convirtió en inesperado aliado de los hombres de negocios. Tanto que, cuatro años después, su reelección influyó para una suba del 14 por ciento en los bonos. Fue el 16 de mayo de 1995. Ese día, el índice MerVal subió 1,8 por ciento, aunque venía de un rally alcista del 60 por ciento en los dos meses anteriores, cuando las encuestas ya auguraban a un Menem triunfador en las urnas.
La fuerte caída de ayer en acciones y bonos resultó una consecuencia directa de que los financistas se habían entusiasmado con un ballottage entre el ex presidente y López Murphy. También ellos estiman que la estrecha diferencia que le sacó Menem a Kirchner parece insuficiente para la consagración del riojano. Y en una sola jornada, los papeles empresarios perdieron todo lo que ganaron la semana pasada, cuando los denominados candidatos “pro-mercado” parecían arrasar.
No es casual que las acciones que más cayeron fueron las de las privatizadas y de los bancos, dos sectores que serían beneficiados en una eventual administración menemista o de López Murphy. La transportadora gasífera TGS retrocedió 14,6 por ciento, seguida por Galicia (-13,7%); BBVA Banco Francés (-12,9%); Central Puerto (-9,8%); Gas Natural (-9,7%); Bansud (-9,6%) y Telecom (-9,3%). Entre los títulos públicos, el Global 2018 fue el que más cayó: 4,5 por ciento. El Boden 2008 cedió 3,7 por ciento; y el Boden 2012, el 0,6.
Un reporte del banco de inversión MBA indicó ayer que el ajuste de los papeles empresarios podría haber finalizado. “Entre los escenarios alternativos, podía haber sido peor”, escribieron los analistas del banco a sus clientes, dando cuenta de la aceptación que, finalmente, tendrían Kirchner (y Roberto Lavagna, su eventual ministro de Economía) en caso de ganar dentro de tres semanas.
Tanto el mercado de las tasas de interés como el dólar se mantuvieron tranquilos tras las elecciones. La moneda estadounidense descendió dos centavos respecto del cierre del último viernes, a 2,83 pesos para la compra y 2,88 para la venta en las casas de cambio.
Hay dos razones importantes para que a los financistas no se les ocurra especular con el verde: los 10.500 millones de dólares de reservas que posee el Banco Central y el enorme superávit comercial, de unos 1000 millones de dólares mensuales. Ante la expectativa de que el dólar se mantendrá en estos valores gane quien gane el ballottage, los bancos le vendieron al Central 14 millones de dólares que habían percibido de los exportadores. El BC a su vez compró otros 11 millones por su cuenta, lo que le arrojó un saldo final a su favor de 25 millones. Otra señal de que la expectativa es de una paridad quieta fue que las grandes compañías cerealeras liquidaron ayer un importante volumen de divisas: 67 millones de dólares.
En el mercado del dinero se notó una caída sensible en los rendimientos de las cauciones. Este instrumento financiero de la Bolsa permite a los inversores tomar préstamos para comprar acciones, aunque en los hechostambién funciona como una alternativa a llevar dinero a los bancos. La disminución del costo en este tipo de endeudamiento revela el escaso interés por adquirir papeles empresarios. Por un préstamo a una semana, que el viernes costaba el 8,5 por ciento anual, ayer se pagaba el 7,9. El único segmento que mostró un aumento fue el las cauciones a 30 días: pasó del 15,2 al 17,8 por ciento anual, demostrando la precaución de los financistas ante la segunda vuelta entre Menem y Kirchner.
Por ahora, el santacruceño es el cuco que en 1989 veían en Menem. El tiempo dirá si, como entonces, se trataba de un fantasma amigo de los financistas.