La recaudación tributaria de mayo alcanzó el record de 61.026,3 millones de pesos, un 20,5 por ciento más que durante el mismo período del año pasado. El incremento estuvo vinculado con los tributos generados por el comercio interno como IVA, contribuciones a la Seguridad Social y el Impuesto a los Débitos y Créditos. Más allá de estos números, el incremento interanual de la recaudación fue el más bajo de los últimos 27 meses. Por ejemplo, entre enero y marzo de este año se mantuvo entre el 29 y 28 por ciento, bajó al 24,4 por ciento en abril y retrocedió hasta el 20,5 el mes pasado. El crecimiento de la recaudación en los primeros cinco meses del año acumuló un ingreso por 258.952 millones de pesos, es decir un 26,1 por ciento. El dato de mayo está claramente bajo ese promedio.

“Nunca antes se recaudaron 61.000 pesos. Esto marca un camino y un piso para el futuro”, aseguró el titular de la AFIP, Ricardo Echegaray, quien junto al secretario de Hacienda, Juan Carlos Pezoa, informó a la prensa los datos de los ingresos tributarios. “El mercado interno volvió a sostener la recaudación, en medio de un contexto internacional desfavorable”, agregó Pezoa.

En cuanto al IVA, se obtuvo un ingreso de 15.799 millones de pesos, un crecimiento del 21,1 por ciento. Si bien el componente impositivo tuvo una suba de 30,6 por ciento, la baja se concentró en el componente aduanero (-3,5) y en las devoluciones a las exportaciones, que se mantuvieron en cero, mientras que doce meses atrás habían sido de 320 millones de pesos.

El llamado impuesto al cheque (débitos y créditos) tuvo una suba de 24,2 por ciento, al representar 3665 millones de pesos. El record anterior de este tributo se había dado en septiembre de 2011, cuando se registró un ingresó de 3542 millones de pesos.

Lo que más creció en mayo fueron los recursos provenientes del sistema de la seguridad social, al totalizar 13.585 millones de pesos, es decir una suba del 32,5 por ciento. Dentro de este rubro, las contribuciones patronales representaron 7773 millones de pesos, una suba del 36,2 por ciento, mientras que los aportes personales fueron 5407 millones, un incremento del 38 por ciento. La baja estuvo en el rubro “otros ingresos de la seguridad social”, que comprende el monotributo previsional y regímenes de regularización para autónomos. La merma fue del 28 por ciento. Esto habla de la continuidad de los aportes en el sistema de trabajo registrado y de una baja en autónomos y monotributistas.

En cuanto al comercio exterior, los derechos de exportación tuvieron una suba del 23,6 por ciento. Los ingresos por retenciones alcanzaron los 5768 millones de pesos. Las principales alzas se registraron en combustibles, residuos y desperdicios de las industrias alimenticias, pellets y harina de soja y cereales. En cuanto a los derechos de importación, la recaudación fue de 1198 millones de pesos, una suba del 4,5 por ciento. Este bajo porcentaje se explica por la política de control a las importaciones, cuyo objetivo es preservar una balanza comercial superavitaria.

Uno de los tributos que menos creció fue el Impuesto a las Ganancias, más allá de que explique buena parte de la recaudación. La suba fue del 6 por ciento (14.883 millones de pesos). Por su parte, la recaudación por Bienes Personales fue de 2049 millones de pesos, con un crecimiento interanual del 17,5 por ciento.