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Desde Córdoba

El Gobierno está preparando un plan de financiamiento para la adquisición de motos de baja cilindrada. “Estamos trabajando para sacar un plan Motos para Todos”, confirmó ayer Diego Dinitz, presidente de la Asociación Argentina de Motovehículos (Motto), cuya conformación se lanzó este jueves durante la 3ª Convención de Concesionarios de Acara-División Motovehículos que se desarrollará hasta hoy en la ciudad de Córdoba. El plan contempla la creación de un fideicomiso a partir de cual se obtendrá el financiamiento. Los directivos de concesionarios además elevarán un documento como cámara para que el Gobierno regule la venta de motos en cadenas de supermercados.

El sector viene mostrando un crecimiento exponencial en los últimos años, producto de la mejora en el poder adquisitivo. “Este es un segmento para trabajadores, ligado a los salarios. Por eso, además de las cuestiones climáticas, la venta de motos aumenta en el segundo semestre, después del cierre de paritarias”, explicó Dinitz. El año pasado se vendieron unas 716.000 unidades, pero para este año desde las concesionarias y terminales prevén que el mercado cierre con una baja de entre 5 y 10 por ciento, producto del impacto de la crisis internacional. Hasta el 31 de julio se patentaron 400.000 unidades. “Nosotros estimamos para 2012 una cifra total de 640.000 unidades vendidas”, estimó a este diario Federico Vahle, de Honda Motors de Argentina.

Para compensar esta leve caída, y con el objetivo de fortalecer la cadena de valor de motovehículos, el Ministerio de Industria, junto con la Secretaría de Comercio Interior y la de Exterior vienen trabajando con las empresas del sector en un programa de financiamiento para la adquisición de motos. Actualmente, una unidad nueva de baja cilindrada equivale a entre uno y medio y dos salarios promedio. “Se viene un anuncio importante. No por nada se movilizó hasta acá Paglieri”, especuló uno de los empresarios presentes en el encuentro que reunió a unos 400 asistentes, de los cuales 175 eran directivos de firmas del sector. El miércoles, la apertura de la convención estuvo a cargo de la secretaria de Comercio Exterior, Beatriz Paglieri, quien reconoció que lo peor del impacto de la crisis global en el país todavía no pasó.

El plan Motos para Todos se instrumentaría a partir de un fideicomiso que le permita al usuario obtener financiamiento barato. Según las estimaciones de la asociación, el sector requiere financiamiento por 2000 millones de dólares. Actualmente, el 70 por ciento de las motos se vende en efectivo, mientras que el resto (30 por ciento) es a crédito, y otorgado en un 50 por ciento por las propias concesionarias.

Por su parte, las grandes cadenas de supermercados ofrecen motos en doce cuotas sin interés, captando buena parte de la demanda de las concesionarias. Según los datos provistos por Dinitz, entre un 15 y 20 por ciento de las ventas son canalizadas por esta vía. Estas cadenas ofrecen marcas de producción nacional, dado que las grandes firmas internacionales tienen sus propias concesionarias. “No pueden vender motos y tomates. Lo hacen sin garantía, servicio posventa ni patentamientos”, criticó el empresario.

Desde la flamante asociación (Mottos) explicaron que pedirán al Gobierno una mayor formalidad en el sistema de ventas. “Tienen que mostrar que tienen talleres para servicios, repuestos, accesorios, servicio posventa y garantías. Si no lo pueden ofrecer, que le prohíban vender. No queremos vendedores, queremos concesionarias”, disparó Dinitz. Según explicó, las concesionarias también ofrecerán las mismas condiciones con las cadenas de supermercados para la venta con tarjeta, pero reconoció que los márgenes son acotados como para dar pelea vía precios.