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Cristina Fernández de Kirchner sostuvo ayer desde su cuenta de Twitter que Argentina está dispuesta a pagar a fondos buitre “pero no en mejores condiciones que el 93 por ciento que entró al canje”. Mediante una serie de veinte mensajes publicados por la mañana a través de esa red social, la Presidenta calificó la postura de los fondos buitre como “absurda” y consideró que “si Argentina tuviera que volver a pagar 170 mil millones de dólares volvería a quebrar. Como en el cuento de la cándida Eréndira, de García Márquez”.

La mandataria tuiteó primero seis mensajes referidos a los treinta años desde la vuelta de la democracia, que van a cumplirse en diciembre, y a los diez años de kirchnerismo, que el oficialismo celebrará en mayo. Los tuits estuvieron en línea con lo expuesto ante la Asamblea Legislativa el viernes pasado:

-Este no es un año cualquiera, coincide con dos aniversarios muy fuertes. 30 años de la recuperación democrática de la República Argentina.

-30 años en que hemos recuperado a la soberanía popular como única fuente legítima del poder público en la República Argentina.

-Cumpliremos 10 años de un proyecto político que abarca a toda la nación, de lucha por igualdad y desarrollo económico, social y cultural.

-Saludo a todas las fuerzas de origen democrático por estos 30 años y por estos 10 años en que los argentinos recuperamos derechos.

-Desarrollo y crecimiento sintetizan estos diez años. El período de crecimiento más sostenido de nuestros 200 años de historia.

-Me atrevo a calificar sin lugar a dudas que esta década iniciada el 25 de mayo de 2003 es la década ganada por todos los argentinos.

Cristina Fernández de Kirchner abordó luego específicamente el conflicto que mantiene el Gobierno con los fondos especulativos:

-Quiero referirme a la audiencia con los fondos buitres de N. Y. Argentina tiene el default más grande de la historia. 170 mil millones de dólares.

-La Argentina es un leading case (caso testigo). Pero no solamente uno económico, como quieren hacernos creer, o financiero, es un leading case político.

Después siguieron dos tuits, de redacción un tanto confusa, donde interpeló a los líderes mundiales buscando su apoyo en la disputa con los buitres:

-Significa si los principales dirigentes mundiales, G-20, organismos multilaterales, gobiernos, van a permitir que un puñado arruine al mundo –a las sociedades, con millones de desocupados, gente que se suicida–. O van a privilegiar sus sociedades, pueblos, sus países, sus historias.

Lo que siguió fue finalmente una serie de ocho tuits referidos específicamente a la propuesta que elevará la Argentina ante la Corte de Apelaciones de Nueva York:

-La Argentina, los 40 millones, hemos hecho un esfuerzo descomunal. Estamos pagando regularmente nuestras deudas.

-Estamos dispuestos a pagar a estos fondos buitre, pero no en mejores condiciones que al 93 por ciento que entró al canje.

-De hacerlo estaríamos violando dos leyes argentinas, la del primer canje y la del segundo canje.

-Además estaríamos estafando y defraudando a los que creyeron y de buena fe aceptaron la propuesta argentina.

-De triunfar la postura absurda del 7 por ciento de los fondos buitre –algo que ni siquiera tiene lógica, más allá de la economía y la política....

-Si Argentina tuviera que volver a pagar 170 mil millones de dólares, volvería a quebrar, como en el cuento de la cándida Eréndira de García Márquez.

-En realidad lo que quieren es que nos sigamos endeudando.

-Hemos ido a contramano de todas y cada una de las cosas que nos decían que teníamos que hacer y nos fue bien. Eso es lo que no nos perdonan.

La mención al relato de García Márquez La increíble y triste historia de cándida Eréndira y su abuela desalmada no fue casual, pues la explotación que ejerce la abuela sobre su nieta al forzarla a prostituirse para pagar una deuda, que nunca termina de estar clara en sus montos y sus plazos, fue interpretada oportunamente por varios analistas como una metáfora del sometimiento permanente que ejercen los países desarrollados sobre los subdesarrollados.