El ministro de Planificación, Julio De Vido, acusó ayer a la minera brasileña Vale de violentar la seguridad jurídica y las leyes argentinas luego de que la empresa anunciara la suspensión de su megaproyecto para extracción de potasio en Mendoza. “Los activos que tiene Vale en Mendoza son las reservas de potasio, en tanto y en cuanto las exploten y las produzcan. Si no las explota y las produce, se violenta el contrato de concesión”, aseguró el funcionario. De este modo, el Gobierno dejó en claro que no aceptará que Vale suspenda las obras y conserve la concesión a la espera de un mejor momento para retomarlas.

La obra de Vale debía estar finalizada a mediados del año próximo, pero desde diciembre los trabajos están paralizados. El gobierno mendocino había coordinado con la empresa en dos oportunidades una fecha para el reinicio de las obras e incluso se la apercibió por abandono de la concesión. De Vido cuestionó ayer en Casa de Gobierno los argumentos que ofreció la empresa y reveló que Vale pidió una serie de ventajas promocionales para continuar con la construcción del yacimiento, las cuales consideró abusivas.

De Vido recordó primero que Vale en octubre había prometido invertir 6900 millones de dólares para explotar 4,3 millones de toneladas de potasio durante 50 años. Luego dijo que en diciembre la empresa planteó que su presupuesto había subido a 8900 millones y en enero a 12.000 millones. “Ningún bien en la Argentina se inflacionó en dólares en el 80 por ciento desde el mes de octubre a hoy, ni las estadísticas más alocadas de nuestros más terribles detractores tienen números parecidos. Está muy claro que la empresa Vale, además de las ventajas promocionales propias de la ley, nos estaba solicitando, para corregir ese desfasaje, la devolución anticipada del IVA, pago de impuestos con bonos a valor nominal”, remarcó el ministro.

Lo que siguió fue un duro rechazo a ese pedido y la acusación de que Vale pidió más ventajas para afrontar una situación financiera difícil que excede lo que le ocurre en el país. “Todos los activos que se desnacionalizaron, que se regalaron en la década del ’90, se hicieron con este sistema (pago con bonos a valor nominal), y así nos fue en el 2001. Yo recuerdo que cada acción de ENTel se pagó de esa manera a un valor de, por cada dólar, 23 centavos de dólar. O sea, cinco veces menos el valor de libro. Además, nos pedían un tipo de cambio diferenciado –que en la Argentina no hay cambio de tipo diferenciado y mucho menos para una actividad de esta naturaleza, que está fortísimamente promocionada–”, agregó.

El funcionario sostuvo que con estas ventajas, más la eliminación de algunas obras de infraestructura y la quita de los derechos de exportación, pensaban ahorrar unos tres mil millones de dólares. “Es exactamente el mismo número que dan sus pérdidas internacionales. Querían, con la nuestra, con la de todos los argentinos, pagarse la deuda”, fustigó. “¿Cómo podíamos darles 3000 millones de dólares extra sin ningún tipo de contraprestación? Eso es robar y nosotros no nos vamos a prestar jamás a expoliar de esa manera a los argentinos, como se los expolió en la década del ’90, cuando con bono basura compraron nuestras empresas públicas”, agregó De Vido.

El ministro buscó dejar en claro además que Vale no tiene problemas sólo en Argentina. “Han renunciado a la participación en la sociedad fabricante de aluminio de Noruega; han vendido 19 buques de gran capacidad de carga, Valemax; paralizaron el proyecto de níquel de Nueva Caledonia y Onza Puma de Vale en la amazonia brasileña; detuvieron la producción en planta de mineral de hierro; desactivaron la participación de potasio en Canadá, congelando un proyecto de tres mil millones de dólares; y otro proyecto que está siendo objeto de suspensión es uno de carbón en Australia. Esto quiere decir que las cuestiones macroeconómicas de la Argentina no tienen absolutamente nada que ver con una política global que ha adoptado la empresa”, sostuvo.

Por último, el ministro cuestionó las interpretaciones de algunos analistas financieros que dijeron que “el mercado” celebró la decisión de Vale de “cuidar su caja”. “Yo, si fuera inversionista o tuviera bonos en la empresa Vale, estaría muy preocupado, porque la empresa ha violentado la seguridad jurídica, ha violentado las leyes de la Argentina y de Mendoza, que es la que les dio un permiso de concesión, y tienen un activo en tanto y en cuanto lo exploten, si no lo explotan lo van a perder”, concluyó. Así dejó en claro que la empresa podría perder la concesión del yacimiento si no reactiva el proyecto en breve.

El gobernador de Mendoza, Francisco “Paco” Pérez, también fustigó a la empresa y calificó su decisión como “intempestiva”, “irresponsable” y “extorsionadora”, pero dijo contar con promesa presidencial de que continuará el proyecto de minería en esa provincia. El gobernador remarcó que la presidenta Cristina Fernández le aseguró que “el proyecto va a seguir” pese a la salida de Vale.