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“Precios Cuidados busca defender el poder adquisitivo del salario y que la gente tenga participación en el proceso de fijación de precios”, definió el ministro de Economía, Axel Kicillof. Agregó que el acuerdo supuso “un golpe a la especulación y un ejercicio vivo de cómo actúa el Estado en defensa de los consumidores, pero sin violentar ni vulnerar la libre empresa”. El secretario de Comercio, Augusto Costa, celebró que “el 70 por ciento de los consumidores valora positivamente el programa” y que “6 de cada 10 consumidores buscan activamente los productos del acuerdo”.

Los funcionarios festejaron el primer aniversario de Precios Cuidados y recordaron que hace un año, en un contexto de mucha tensión a raíz de la devaluación del peso, los pronósticos eran pesimistas. “Recuerdo que en enero, cuando se lanzó esto, los analistas decían que se disparaba la inflación y el dólar, hablaron cualquier disparate y sin embargo las empresas firmaron igual. Esto es una nueva refutación de los pronósticos desinformados”, señaló Kicillof. “La clave del éxito fue el poder popular que transformó Precios Cuidados en un programa que hoy defienden todos los argentinos”, agregó el ministro.

Por su parte, Costa subrayó que ya participan 101 empresas del acuerdo y que “se sumaron muchas pymes que por primera vez van a tener la oportunidad de acceder a las góndolas de las grandes superficies”. Los empresarios pyme defendieron la política oficial de administración de precios. Marcelo Fernández, presidente de la Confederación General Empresaria, indicó que “es muy alentador que las pymes comiencen a acceder a las góndolas mediante el programa Precios Cuidados, ya que esto genera igualdad de oportunidades y un sistema de formación de precios con referencias para los consumidores, que es libre de la arbitrariedad de los sectores concentrados y especulativos”. En relación con el crecimiento de las ventas de los artículos del acuerdo, Costa agregó que, “al comienzo del año pasado, el programa les representaba a las grandes cadenas un 5 por ciento de la facturación y en la actualidad, alrededor del 20 por ciento”.

Más allá de la buena voluntad de las empresas para continuar con su participación en el acuerdo, funcionarios y directivos del sector privado, al momento de definir los precios, mostraron los dientes. “Ha sido una negociación dura. Pero eso no es malo. Ellos han venido a pelear por una mayor rentabilidad y el Estado hizo lo suyo, para conseguir precios justos, ni muy altos ni muy bajos”, dijo Kicillof.

El programa está presente en 2018 bocas de grandes cadenas de supermercados, 308 supermercados y autoservicios regionales, 120 mayoristas y distribuidores, 302 supermercados chinos y 4500 almacenes.