La Argentina apeló ayer la orden del juez Thomas Griesa que extendió los efectos de su bloqueo sobre los pagos de la deuda externa al Citibank. El Ministerio de Economía calificó de “insólita” la decisión del magistrado de alcanzar con las llamadas órdenes de pari passu a los bonos del canje regidos por ley argentina. “Las decisiones de la Justicia estadounidense afectan gravemente al sistema financiero global. Su único objetivo es otorgar mayor poder de extorsión a los fondos buitre”, consideró el equipo económico. Desde el Palacio de Hacienda enfatizaron que la decisión del juez alcanza a la llamada “deuda doméstica denominada en dólares” que “de ninguna manera puede ser alcanzada por la cláusula pari passu, pues se trata de endeudamiento interno, regido por el derecho local”. La cartera que conduce Axel Kicillof recordó que el mismo Griesa había reconocido previamente que no había bases para extender la orden a estos bonos. Sin embargo, a mediados del mes pasado el octogenario magistrado “revirtió sus propias decisiones, excediendo, nuevamente, su jurisdicción, tal como lo había hecho con los bonos del canje regidos por la ley inglesa”..