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A pesar del aumento de liquidez que registra mes a mes el sistema financiero, el crédito hipotecario sigue sin aparecer. El resultado singular de esta realidad sobre el sector inmobiliario es un mercado de alquileres floreciente, sobre todo en los inmuebles de elevado valor relativo, aunque con precios estancados en paralelo con los ingresos de la mayor parte de la población. A la vez, la construcción sólo se recupera en refacciones y pequeñas obras privadas.
Durante el pasado octubre los depósitos privados crecieron en 1600 millones de pesos, de los cuales 1500 fueron depósitos en cajas de ahorro y cuentas corriente. Las cifras reseñadas por la Fundación Capital en su último informe semanal destacan además el aumento de 1500 millones de pesos en los depósitos del sector público, lo que en sólo un mes elevó en más de 3000 millones los depósitos totales del sistema. Con esto, la “ratio de liquidez” del sistema financiero, es decir la suma de encajes y efectivo de los bancos en relación a los depósitos totales, se encuentra ya en el 26 por ciento, un nivel superior al promedio registrado durante la convertibilidad, que fue del 22,5 por ciento. Aunque estos números permitirían preverlo. Sin embargo el crédito sigue sin aparecer salvo para la financiación del consumo de corto plazo (personales y tarjetas de crédito), que en octubre fue de 129 millones de pesos. El de largo plazo, prendas e hipotecas sigue en valores negativos, es decir que se recupera más de lo que se presta. En el último mes el saldo negativo de estos dos rubros fue 187 millones. Para peor, ante la falta de alternativas, el ahorro local continúa fugándose.
Sobre el mercado inmobiliario esta realidad provoca un efecto singular. Quienes podrían pagar la cuota de una hipoteca, oferta que hoy no existe, se vuelcan a la demandan alquileres de elevado precio relativo. Sin embargo, el buen comportamiento en este sector de la demanda no se tradujo en aumento general de los valores de los alquileres, los que en consonancia con el ingreso de la mayoría de la población continúan estancados.
El presidente de la Cámara Inmobiliaria Argentina, Hugo Menella, consideró que “hay mucha gente que por falta de un crédito cuenta con posibilidades económicas de volcar buena parte de sus ingresos al alquiler de un buen departamento”. En consecuencia, argumentó, “el mercado se presenta muy demandado”, pero con una “firme estabilidad” en los precios de los inmuebles, que se explica por “la falta de liquidez que presentan los futuros locatarios”.
La combinación de ausencia de crédito con la falta de expectativas sobre la mejora de los precios significó que la recuperación de la construcción en lo que va del año sólo se notara en pequeñas obras y refacciones.