Sábado, 2 de abril de 2016 | Hoy
ECONOMíA › ADVERTENCIA DE DIRIGENTES DE LA UNION INDUSTRIAL POR EL TARIFAZO Y LA CRISIS BRASILEÑA
Después de años de reclamar la eliminación de subsidios y de minimizar la crisis brasileña, ahora la UIA se queja por los aumentos de tarifas y la debacle económica del principal socio comercial de la región. Amenazan con despidos masivos.
El tarifazo y el aumento en los costos logísticos por la suba del combustible, sumados a la crisis de la economía brasileña, podrían generar la destrucción de 200 mil puestos de trabajo en el sector manufacturero. Así lo estimó ayer el secretario de la Unión Industrial Argentina (UIA), Juan Carlos Sacco, quien aseguró que los incrementos en los servicios decretados por el gobierno de Mauricio Macri impactarán en mayor medida en las pequeñas y medianas empresas. En este segmento, Sacco estimó unas 7000 firmas afectadas, para lo cual sostuvo que se requiere excluir de los ajustes a esas empresas y recalcular un esquema de pagos que puedan cumplir. El directivo afirmó que todos estos puntos fueron presentados al ministro de Producción, Francisco Cabrera, y a su equipo económico en la reunión que mantuvieron anteayer en la sede de la entidad fabril.
Mientras el sector industrial aguarda por medidas oficiales que permitan reactivar la actividad fabril, crecen las dudas por el impacto que tendrán los ajustes de tarifas energéticas, combustible y la caída en el consumo interno. “Es un sincericidio”, sostuvo Sacco en referencia a la denominación de sinceramiento de tarifas que el macrismo utiliza para presentar el fuerte aumento en los servicios de luz, gas, agua y de transporte público, peajes y naftas. Lo cierto que estos mismos dirigentes industriales estuvieron durante año criticando la política de subsidios, y ahora padecen la medida que ellos mismos postulaban.
A este panorama se suma la delicada situación económica brasileña, el principal mercado para las exportaciones argentinas de origen industrial.
Estas representaron el 45,9 por ciento en 2014 y el 39,8 por ciento en 2015. De acuerdo con el último informe del Centro de Estudios de la UIA, “la menor demanda externa por parte de este país condiciona la capacidad de recuperación de la industria nacional”. La UIA descubrió que la crisis brasileña afecta a la industria local, aspecto que había minimizado en los últimos años, concentrándose en presionar por una fuerte devaluación. Ahora se verifica que la brusca alteración de la paridad cambiaria no mejora la ecuación exportadora de la industria.
“Si no hay algunas medidas rápidas, las pérdidas (de empleo) en el sector industrial van a ocurrir. Se pueden perder muy rápidamente entre 100 y 200 mil puestos de trabajo”, aseguró Sacco en declaraciones radiales. Si bien consideró que la situación incluye a un conjunto de factores que van desde la economía brasileña hasta las medidas internas, el empresario del sector gráfico apuntó de manera directa contra la cartera de Energía, que conduce Juan José Aranguren. “Vemos que desde el Ministerio de Energía, donde está Aranguren, no aflojan. Parece que se quieren suicidar. Primero la luz, ahora el gas, el transporte, el combustible”, enumeró el secretario de la entidad fabril.
El dirigente patronal destacó la visita del equipo de Cabrera a la entidad fabril, a quienes, según sostuvo, se les presentó el diagnóstico sobre la actividad. “También hicimos propuestas desde lo laboral y lo crediticio para ir paliando la coyuntura”, comentó. La asistencia de Cabrera tampoco tranquilizó a los empresarios, ya que ofreció un discurso centrado en la apertura comercial. “Argentina tiene que insertarse en el mundo”, fue lo que les comunicó.
“La tendencia para el primer semestre es muy dura. Más allá del impacto de los aumentos que van a afectar los bolsillos de los trabajadores –y el consumo– ya llega también a los empresarios. Las empresas están entrando en situación de crisis por el impacto de los aumentos y por la caída de producción”, sostuvo Sacco. El empresario gráfico consideró que los ajustes en las tarifas debieron haber sido más graduales. “Hay riesgo de pérdidas de trabajo para unas 7000 pymes si no se deshace el aumento para este segmento y se hace un plan especial. No es que no se quiere pagar, sino que no se puede pagar”, sostuvo el secretario de la UIA. “Se puede llegar a pensar que si no hay medidas rápidas, se pueden perder entre 100 y 200 mil puestos de trabajo”, señaló el empresario.
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