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Como un intento de “recomponer la red de proveedores locales” en el área de telecomunicaciones, el Gobierno lanzó ayer una segunda tanda de proyectos de desarrollo industrial y tecnológico en el sector. A mediados del año pasado, no bien asumido, el Gobierno ideó una manera de fomentar el empleo en el sector de las telecomunicaciones, mediante un fondo fiduciario aportado con fondos de las empresas líderes del sector. Aunque el monto obtenido hasta ahora fue exiguo, el plan logró poner en marcha diversos proyectos que, en conjunto, habrían representado la creación de 1800 puestos de trabajo. Ayer se dieron a conocer seis nuevos proyectos a financiar. Entre ellos, la reapertura de una fábrica de cables telefónicos y otro para interconectar nueve cooperativas telefónicas en el sur de Córdoba.
El monto de inversiones a financiar a través de los seis proyectos para este año suma apenas 12,7 millones de pesos. “El fideicomiso no es un éxito si juntamos 72 millones o 100 millones, es un éxito si ganamos el debate de ideas de compre local, y ese debate lo hemos ganado”, respondió a estas objeciones el secretario de Comunicaciones, Guillermo Moreno. El funcionario destacó que mientras en el año 2000 las compras de los principales operadores del sector a proveedores locales representaban apenas el 30 por ciento de sus adquisiciones totales, este año esa proporción se elevará al 55 por ciento, de acuerdo con las órdenes de compra ya emitidas.
Meses atrás, como una de los primeros anuncios del actual gobierno, Néstor Kirchner lanzó un plan específico para el sector, cuyo objetivo era que las grandes empresas del sector adquirieran sus insumos en el mercado local en vez de importarlos. Para ello, reclamó su aporte a un fondo fiduciario que permitiera recomponer la red de proveedores locales, prácticamente barrida por la importación con el ingreso dominante al mercado de los grandes operadores telefónicos. La adhesión al proyecto de las grandes compañías se tradujo sólo parcialmente en los montos comprometidos. Sin embargo, ayer fue puesta en funcionamiento la segunda etapa en la que ya se observa la implementación de proyectos independientes de las grandes operadoras. Ejemplo de ello son la interconexión entre cooperativas cordobesas y el proyecto de instalación de 10 mil nuevas líneas por parte de una compañía operadora santafesina.