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La recaudación del mes de julio alcanzó un “record histórico” de 4986,8 millones de pesos, lo que implica un aumento de 29,3 por ciento, respecto a igual mes del año pasado. La suba se debe principalmente a los efectos de la inflación de más del 30 por ciento en el primer semestre, y al aumento en la alícuota del impuesto al cheque.
El director de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), Alberto Abad, aseguró que “este resultado afirma una tendencia” y vaticinó que “hasta fin de año persistirán las variaciones positivas”.
El aumento de la recaudación en julio se explica en parte por el incremento en la alícuota del impuesto al cheque, que representan más del 10 por ciento de la recaudación total, y en los aportes extras obtenidos a través de las retenciones a las exportaciones (cerca del 20 por ciento). No obstante, el principal componente de la suba nominal de ingresos fue la inflación.
Abad consideró que si bien en agosto se espera que se mantenga la tendencia creciente, es probable que el aumento “no sea del mismo nivel”, por el impacto de los adelantos del impuesto a las Ganancias que operaron en julio.
El impuesto a las Ganancias recaudó el mes pasado 763,8 millones de pesos, con un incremento de 2,2 por ciento, frente a igual mes del año pasado. Ganancias DGI recogió 732 millones (2 por ciento) y Ganancias Aduana obtuvo 31,8 millones (7,4 por ciento).
Por IVA ingresaron al fisco 1412,9 millones de pesos, lo que implica una mejora de 11,7 por ciento en la comparación interanual. IVA DGI aportó 1250,4 millones de pesos (21,7 por ciento), IVA Aduana 507,8 millones (20,5 por ciento), mientras que hubo devoluciones por 345,3 millones (87,2 por ciento).
En concepto de “comercio exterior” se recolectaron 864,9 millones de pesos, lo cual significa un aumento de 299,5 por ciento. Aquí se incluyen 733 millones provenientes de las retenciones a las exportaciones, que el año pasado no existían, de ahí la magnitud del aumento interanual.
El impuesto al cheque le permitió al Estado conseguir 472,4 millones de pesos, cifra 61,9 por ciento superior a la de julio de 2001. Como se dijo, aquí incidió la suba de la alícuota, que pasó de 0,4 por ciento a 0,6 por ciento, y la inflación.
Por las naftas ingresaron a la AFIP 171 millones (23,7 por ciento más) y por “otros combustibles” se recaudaron 206,2 millones de pesos (46,6 por ciento más). En este segmento el salto de las tarifas explica la mejora.
Los reintegros a las exportaciones fueron de 87,6 millones de pesos, con un alza de 88,9 por ciento. Por impuestos internos coparticipados hubo pagos por 136,4 millones de pesos (53,6 por ciento más).
El impuesto por “ganancia mínima presunta” agregó 53,1 millones de pesos (28,8 por ciento), mientras que “bienes personales” creció 58 por ciento a 31,9 millones de pesos. En cambio, los aportes personales cayeron 38,2 por ciento, de 657,1 millones a 406 millones de pesos, debido a la reducción de alícuota, del 11 al 5 por ciento. En tanto que los aportes patronales recolectaron 709,2 millones de pesos, con un aumento del 11,6 por ciento.
Sobre el total recaudado de 4986,8 millones de pesos, 2921,7 millones serán para la administración nacional, 865,2 millones son contribuciones a la seguridad social, 1036,2 millones se girarán a las provincias, siendo 163,8 millones ingresos no presupuestarios.