La provincia de Buenos Aires lanzó oficialmente la Agencia de Recaudación de Buenos Aires (Arba). El acto donde Santiago Montoya asumió la dirección ejecutiva del organismo fue encabezado por el gobernador Daniel Scioli. La nueva dependencia viene a reemplazar a la Dirección de Rentas. Desde el gobierno bonaerense enfatizaron que no se trata sólo de un cambio de nombre, sino que Arba tendrá más facultades, mayor estructura y más inspectores. Montoya explicó a Página/12 que “esta agencia nos va a permitir tener más herramientas para profundizar la lucha contra la evasión”, para agregar que “Arba cuenta ahora con la posibilidad de invertir en tecnología, capacitación al personal y en recursos publicitarios”. Afirmó, además, en tono por demás exagerado, que “tuvieron que pasar 200 años para implementar un cambio de esta magnitud”.

La agenda de Arba para las próximas semanas es agitada: juicios a deudores por 500 millones y ofensiva sobre el sector agropecuario donde más de la mitad de los productores no están presentando sus declaraciones juradas. Uno de los objetivos que se plantea Montoya es evitar las maniobras de los morosos a los que se les embargaron las cuentas. El funcionario afirmó a Página/12 que los “objetivos recaudatorios son más mediatos que inmediatos y los resultados más concretos van a comenzar a surgir a partir de la segunda parte del gobierno de Scioli”. Las nuevas capacidades con las que contará Arba le permitirá “mantener varios objetivos al mismo tiempo, controlar a todos los sectores y, de ese modo, les tiraremos a los evasores con todo lo que tenemos a mano”, sostuvo el funcionario.

Si bien la Agencia no comenzará a funcionar hasta abril, Montoya recordó que este mes se iniciarán alrededor de ocho mil juicios a contribuyentes con deudas por un monto total de entre 300 y 500 millones de pesos con el fisco. Según indicó, “van a ser juicios contra deudores de todos los impuestos, contra aquellos que adeudan mucho y contra algunos que tienen muchas propiedades y deben por alguna de ellas”. También “se incluirá a aquellos que se suscribieron a planes de pago y se volvieron a atrasar”, apuntó.

En el campo lo que está sucediendo es que “cerca de dos tercios de los propietarios no están inscriptos y los que están declaran sólo el 60 por ciento; esto genera un costo fiscal de poco menos de 1000 millones y va a llevar cierto tiempo recuperarlos”, comentó Montoya a este diario. La investigación de este proceso de evasión contó con la ayuda de un complejo software que “permite conocer por imágenes satelitales qué tipo de sembrada existe en cada terreno y además saber cuánto produjo y, por lo tanto, cuánto debería pagar de impuestos”.

La ministra de Producción de la provincia, Débora Giorgi, indicó a Página/12 que la creación de Arba “es un cambio necesario, al brindar el nuevo organismo recaudador tres características muy auspiciosas: agilidad, autonomía y recursos para desarrollar un sistema de recaudación eficiente”. La agencia absorbió siete reparticiones que funcionaban bajo la órbita del Ministerio de Economía. El organismo se financiará con el 3,5 por ciento de la recaudación fiscal, ingresos estimados para este año de 13 a 16 mil millones. De esta forma, el presupuesto alcanzaría los 500 millones de pesos.

En diálogo con este diario, Montoya enfatizó la importancia de las inversiones en tecnología “para que los inspectores rindan más y no mandarlos a la calle con los ojos vendados”. Montoya señaló a Página/12 que existirá “un pequeño fondo de estímulo al personal para cuando aumente la recaudación”. Además insistió en la necesidad de capacitar constantemente al personal: “Muchas veces por no gastar 1000 pesos por inspector para que sepa utilizar cierto software, nos perdemos de recaudar tres o cuatro millones”, concluyó.