La decisión oficial de declarar la caducidad de la licencia de Fibertel aparecía en la previa como el tema que iba a acaparar toda la atención en las Jornadas Internacionales de la Televisión por Cable. Sin embargo, el Gobierno se las ingenió para darles a los cableros un tema más de conversación al publicar en el Boletín Oficial una resolución que fijó a partir de hoy el plazo de desinversión para adecuarse a la nueva ley de medios y otra norma donde se establecen las pautas para el ordenamiento de las grillas de programación (ver página 7). El combo de novedades llevó al presidente de la Asociación Argentina de Televisión por Cable (ATVC), Walter Burzaco, un hombre de Clarín, a acusar al Gobierno de querer “terminar de cuajo con el sector, de cercenar el pluralismo y limitar la libertad de expresión”.

Con respecto a la caducidad de la licencia de Fibertel, Burzaco afirmó que la medida beneficia a las telefónicas, clásico rival del sector, que tiene prohibido brindar servicios audiovisuales, pero compite con las cableras en el segmento de banda ancha. “Nadie mira el enorme beneficio que reciben estas grandes corporaciones de capital foráneo”, sostuvo en referencia a los clientes que absorberán Arnet y Speedy, si se confirma la salida de Clarín del mercado de Internet.

Burzaco, quien fue el encargado de inaugurar las jornadas, también la emprendió contra la ley de servicios audiovisuales y su reciente reglamentación, a la que cuestionó por estar “llena de trampas y excepciones”. En lo que respecta a la ley, los cableros cuestionan que a las empresas del sector se les exijan licencias para brindar el servicio y que el tope sea de 24 a nivel nacional. Además, cuestionan que las empresas no puedan concentrar más del 35 por ciento del mercado nacional. Este último punto afecta sólo a Cablevisión y el límite de las licencias también a Supercanal. El resto de las compañías son pymes que no se ven afectadas por esas cláusulas de la ley. Las pautas para el ordenamiento de la grilla es un punto que sí involucra a todos los actores y también hubo cuestionamientos, ya que dijeron que esa exigencia es “inconstitucional”.