La Legislatura porteña aprobó anoche una ley que pretende prevenir los delitos cometidos por personas que se trasladan en motos. La norma, cuyos detalles se ajustaban en el debate en particular, que se prolongaba al cierre de esta edición, propone restringir la circulación de motos con acompañantes en el casco céntrico de la ciudad, en horario bancario, entre otras medidas. La votación en general, que llegó tras seis horas y media de debate, no favoreció al proyecto que impulsaba el macrismo sino a uno consensuado por bloques de la oposición. Sin embargo, se incluyó en el debate en particular la obligatoriedad de llevar chaleco reflectivo identificatorio, con número de dominio, para conductor y acompañant, lo que generó un escandalo que obligó a un cuarto intermedio. También se descartó la propuesta del diputado Daniel Amoroso de extender la prohibición de circular sin acompañante a toda la ciudad.

El macrismo impulsó el debate de apuro, sin que los proyectos hayan sido tratados en las comisiones. Para eso, convocó a una sesión especial, obtuvo el quórum necesario para sesionar y el cuerpo tuvo que constituirse en comisión para debatir los tres proyectos en danza. Para aprobar la norma, entonces, era necesaria una mayoría especial, de 31 votos. El proyecto consensuado por la oposición, con el apoyo del macrismo, obtuvo 46 votos y cuatro legisladores votaron en contra: Marcelo Parrilli (MST), Delia Bisutti (Proyecto Sur), Julián D’Angelo (socialista) y Raúl Fernández.

El macrismo defendió su proyecto como decisivo para evitar este tipo de delitos. Los voceros del PRO fueron Gerardo Ingaramo, Martín Ocampo y el presidente del bloque, Cristian Ritondo. Desde la oposición se criticó con dureza la propuesta porque se la presentaba como una “solución mágica”, y se cuestionó al Ejecutivo por no utilizar las herramientas de prevención con las que cuenta, como el control policial de la documentación de motociclistas y sus vehículos: según había admitido el subsecretario de Seguridad, Matías Moilinero, ante los legisladores, hasta hace poco se realizaban apenas cuatro controles diarios a conductores de motos y recién en los últimos días se elevó esa cantidad a 25 controles diarios. Pese a esas críticas, se terminó votando un proyecto consensuado con medidas restrictivas para los motociclistas.

El proyecto consensuado fue presentado por el presidente de la Comisión de Tránsito, Claudio Palmeyro, y la vicepresidenta de la Comisión de Justicia, Silvina Pedreira, ambos del PJ. La iniciativa prohíbe la circulación de motos con acompañante en el área delimitada por las avenidas Córdoba y L. N. Alem y las calles Rivadavia y Carlos Pellegrini, entre las 10 y las 16. También establece la prohibición de venta de combustible a vehículos sin chapa patente y cuyos conductores no lleven casco. Además, se propone que la chapa identificatoria de las motos sea del mismo tamaño que la de los automotores. Finalmente, se establece que las exigencias tendrán una vigencia de 180 días, a modo de prueba. Al finalizar el plazo, el Ejecutivo deberá enviar a los legisladores un informe con la evaluación.

Durante el debate, el diputado Fernando Sánchez (Coalición Cívica) fustigó al Ejecutivo por proponer una medida que requiere de un efectivo control policial sin que se realicen procedimientos sistemáticos para controlar si las motos que circulan están en regla. “Los ladrones que circulan en motos por lo general no van con un vehículo de su propiedad ni tienen los papeles en regla”, dijo. Y cuestionó al jefe de Gabinete, Horacio Rodríguez Larreta, por no coordinar acciones con la Policía Federal. “Le tiene miedo a Aníbal Fernández”, disparó.

El socialista D’Angelo denunció que Macri había subejecutado el presupuesto destinado a la Policía Metropolitana: “Usó en seis meses el 18 por ciento para el personal de calle y el 13 por ciento de lo aprobado para capacitación, mientras que en publicidad y propaganda lleva gastado el 74 por ciento”.

A María José Lubertino (Encuentro Popular para la Victoria) le llamó la atención el apuro del oficialismo, cuando “en 2007 y 2008, cuando tenían mayoría en las comisiones, no aprobaron un proyecto similar presentado por el diputado (macrista) Carlos Araujo”.

Sergio Abrevaya (Coalición Cívica) coincidió con otros legisladores en calificar de inconstitucional el requisito de identificar a los motociclistas y acompañantes con chalecos reflectivos y opinó que “el macrismo debería ocuparse de poner a la policía metropolitana donde es necesaria, de acuerdo con el mapa del delito que dice tener”.

Marcelo Parrilli justificó su voto en contra al sostener que el proyecto se aprobaba “por miedo de los legisladores a perder votos”. “El problema de la inseguridad es una consecuencia de la falta de integración social, de educación y salud, áreas en las que este gobierno ha acentuado su deterioro”.