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El Banco Central se vio obligado otra vez a intervenir para sostener el precio del dólar. Ayer absorbió 76,5 millones de dólares, y la moneda estadounidense cerró en 2,77 pesos para la compra y 2,82 para la venta, un centavo por encima del cierre del último viernes. En dos días, el Central ya compró 167,4 millones de dólares, casi la mitad de lo adquirido el mes pasado. La perspectiva de los financistas es que la tendencia del dólar es bajista. Así lo demuestra el mercado de futuros: para fin de mayo se pagó un dólar a 2,81 pesos. Y de 2,86 para fin de junio. La ausencia de demanda de billetes verdes es notoria: los bancos le vendieron al Central 69,7 millones de dólares que recibieron de los exportadores. Por una cuestión estacional, para las próximas semanas se espera una mayor actividad del comercio exterior. En tanto, después de tras jornadas seguidas de subas, las acciones líderes retrocedieron ayer un 0,7 por ciento en promedio. Hubo negocios por 58 millones de pesos. La misma tendencia mostraron los títulos públicos, con caídas de entre 1,5 y 2 por ciento.