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Si faltara algún indicio de la inflexibilidad que existe en el FMI con relación a la Argentina, ayer se conoció que Anoop Singh fue ascendido en la escala burocrática de ese organismo. Singh está a cargo de la oficina de Operaciones Especiales, dependencia que se estrenó precisamente para el caso de la Argentina, puesto que dejará a fin de año para reemplazar al mendocino Claudio Loser en el estratégico departamento Hemisferio Occidental para América Latina y el Caribe. El propio director del FMI, Horst Köhler, anunció ayer el ascenso de Singh. Este sucede a Loser, a quien también reemplazó al frente de la negociación con Buenos Aires en medio de intensos rumores internos sobre una supuesta “mano blanda” del mendocino en el manejo de la crisis argentina. Al notificar a la mesa de directores sobre sus intenciones de nominar a Singh, Köhler dijo que el funcionario “demostró un fuerte liderazgo operacional e intelectual en varias de sus misiones”. Singh seguirá en su actual cargo hasta que Loser se retire a fin de año, cuando asumirá formalmente el control del departamento para el Hemisferio Occidental.