Desde Londres

En un memo filtrado al dominical Mail on Sunday, el ex primer ministro Blair acusó a su sucesor, Gordon Brown, de un desempeño “lamentable” y “vacío” y de una total “confusión de táctica y estrategia”. En el memo, Blair le reprocha a Brown “olvidar nuestros logros” y aceptar el argumento de los conservadores de que su gobierno era puro “spin”, pura presentación mediática sin contenido ni sustancia. “Echó por la borda toda nuestra política y no puso nada en su lugar”, dice en el memo.

El memo fue enviado a colegas partidarios a fines del año pasado luego de que el primer ministro Brown decidiera no convocar a elecciones anticipadas. En medio de la especulación actual sobre el futuro político de Brown, resulta una bomba de tiempo. “El problema que tuvimos con el Congreso partidario de los conservadores no es que fue brillante, sino que el nuestro fue patético. Por eso a los tories les bastó con decir algo concreto para que pareciera que tenían una plataforma política de sustancia”, dice el memo. En una frase que va a reverberar con particular fuerza en la situación actual, el ex primer ministro agrega que “no parece que hayamos aprendido la lección”. Ocho meses más tarde, las sucesivas derrotas electorales que ha sufrido el laborismo y la caída en picada de la popularidad de Brown, parecen darle la razón a Blair.

La oficina del ex primer ministro no confirmó ni desmintió la existencia del memo, pero reiteró lo que ha sido el mantra de Tony Blair desde que dejó 10 Downing Street en junio del año pasado: “Apoyamos ciento por ciento al gobierno de Gordon Brown”. No obstante, en una clara señal de que las compuertas de la rebelión están abiertas de par en par, el ex ministro de Educación Stephen Byers, fervoroso blairista, atacó a Brown por su “falta de ideas” en una entrevista que concedió al dominical The Observer. “El laborismo tiene que escalar una montaña para ganar la próxima elección y, sin embargo, lo único que tenemos es una multitud de mini-iniciativas que no sirven para nada. Tenemos que ser ambiciosos y audaces para cambiar los términos del debate público”, dijo Byers al Observer.

Las declaraciones de Byers parecen un eco del artículo que publicó el ministro de Asuntos Exteriores David Miliband el miércoles en The Guardian. El artículo desató una tempestad política al reclamar un nuevo comienzo con ideas audaces para ganar las próximas elecciones. En medio de una febril especulación sobre conspiraciones y conjuras, el primer ministro recibió el apoyo de tres miembros de su gabinete: Alistair Darling, Harriet Harman y John Denham. Los tres destacaron las cualidades políticas de Brown y señalaron que era el único que puede sacar al Reino Unido –y al laborismo– de su actual crisis. Por el momento, no está nada claro que el resto del partido esté de acuerdo.