Una mujer resultó la novedad de los comicios costarricenses. La candidata oficialista Laura Chinchilla ganó anoche la votación con el 47,6 por ciento votos, según el segundo cómputo difundido por el tribunal electoral. En segundo lugar se ubicó el contendiente de centroizquierda Ottón Solís (22,46 por ciento), quien reconoció la victoria de Chinchilla. “Felicito a doña Laura, va a ser la presidenta de este país. Con respeto aceptemos la realidad”, dijo Solís.

El Partido Liberación Nacional (PLN) del saliente presidente Oscar Arias y Chinchilla, la fuerza dominante desde 1948, es nominalmente socialdemócrata pero tildado de centroderecha por disidentes que se marginaron de él. Entre ellos se encuentra Solís, ex ministro del primer gobierno de Arias (1986-1990) y actual líder del Partido de Acción Ciudadana (PAC), la principal fuerza opositora. El otro candidato que sehabía presentado esperanzado era Otto Guevara (21,8), líder del Movimiento Libertario (derecha), un pequeño partido con seis diputados en la actual Asamblea, que también se ha postulado tres veces a la presidencia.

Durante todo el día, los costarricenses se lanzaron a las calles de la capital y de otras ciudades con banderas y globos para apoyar al candidato de su predilección. Las arterias principales de la ciudad estaban atascadas de vehículos que a golpe de bocina más parecían celebrar el triunfo de la selección en un mundial de fútbol que una jornada electoral.

El presidente y Nobel Oscar Arias definió los comicios como “una fiesta multicolor en la que cada cual vota de acuerdo con su conciencia”. “Lo importante es que al final todos quedemos satisfechos con el resultado”, dijo a la prensa tras emitir su voto en la Escuela Carlos Sanabria Mora, en Pavas, un barrio de las afueras de San José.

En una Centroamérica con países con altas tasas de crímenes y sacudida por un golpe de Estado en Honduras, denuncias de fraude electoral en Nicaragua y acusaciones, falsas, de que el presidente de Guatemala ordenó un asesinato, los comicios de Costa Rica son vistos como ejemplares por unos 200 observadores internacionales que los supervisan. “Es un proceso electoral bastante sólido, con un comportamiento cívico ejemplar’’, declaró la jefa de la misión de observadores de la Organización de Estados Americanos (OEA), la colombiana María Emma Mejía.

La inseguridad y la economía centraron la campaña, pero no se esperan grandes cambios en el país, dado que los candidatos apenas se diferenciaron en sus programas. Los contendientes defienden la postura de combatir con mano dura el crimen organizado. Es Chinchilla quien se adelantó en precisiones y dijo que reforzará la policía y combatirá el narcotráfico que pasa por Costa Rica.

Tal como lo anticiparon los últimos sondeos, Chinchilla será la primera mujer que llegue a la presidencia en su país.