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Fidel Castro habría dicho que el modelo cubano ya no funciona para la isla, según publicó ayer la revista estadounidense The Atlantic. También, le habría pedido al presidente iraní que termine con su antisemitismo.

“El modelo cubano ya no funciona ni para nosotros”, habría respondido el líder histórico de la Revolución Cubana a una pregunta del periodista Jeffrey Goldberg acerca de si aún valía la pena exportar la revolución socialista. El reportero, que visitó La Habana a finales del mes pasado por invitación de Castro, no ofreció en su reportaje más declaraciones del dirigente sobre ese tema.

A continuación de la supuesta respuesta de Fidel, Goldberg citó a la especialista estadounidense Julia Sweig, quien lo acompañó en su viaje a la isla. La analista intentó matizar la respuesta del ex jefe de Estado. “Castro no estaba rechazando las ideas de la revolución. Lo interpreté como un reconocimiento de que bajo el modelo cubano, el Estado tiene un papel demasiado grande en la vida económica del país”, aclaró Sweig. Según la experta del Consejo de Relaciones Exteriores, la intención de Fidel sería crear un espacio para que su hermano Raúl pueda aplicar las reformas necesarias. “Seguramente encontrará resistencias de los comunistas ortodoxos dentro del partido y la burocracia”, analizó Sweig.

Hace dos meses que Fidel Castro volvió a la vida pública, después de haber estado prácticamente muerto y haber resucitado, como definió en una entrevista en el diario La Jornada. Desde entonces, brindó reportajes, escribió artículos y habló ante el Parlamento cubano acerca de una posible guerra nuclear mundial. Sin embargo, prefirió evitar cualquier mención a la situación actual en la isla, después de que el régimen socialista hubiera liberado a opositores encarcelados y hubiera hecho otros anuncios.

A los pocos meses de su asunción, Raúl Castro prometió cambios estructurales en el sistema económico de La Habana, pero remarcando que no se abandonará el socialismo en favor de un modelo de libre mercado. A principios del mes pasado, el hermano menor de Fidel explicó que se permitirá a los cubanos abrir pequeños negocios, contratar mano de obra y comercializar directamente algunas producciones. Algunas de las medidas estaban destinadas a controlar el sobreempleo estatal.

Goldberg publicó el martes la primera parte de la entrevista, en la que Castro se habría distanciado de uno de sus fuertes aliados, el presidente Mahmud Ahmadinejad, por su antisemitismo. El líder cubano le habría reclamado al mandatario iraní que deje de difamar a los judíos. “Castro criticó a Ahmadinejad por negar el Holocausto y explicó por qué el gobierno iraní le haría un mejor servicio a la causa de la paz si reconociera la historia de antisemitismo y tratara de comprender por qué los israelíes temen por su existencia”, escribió el periodista estadounidense.

Según Goldberg, Fidel le habría pedido que transmita un mensaje al premier israelí. “Israel sólo tendrá seguridad si renuncia a su arsenal nuclear y el resto de las potencias nucleares mundiales sólo tendrán seguridad si ellas también renuncian a sus armas”, habría dicho Castro refiriéndose a Benjamin Netanyahu y sus aliados.

Las autoridades cubanas no ratificaron ni desmintieron lo publicado. El periodista prometió que en la próxima entrega difundirá declaraciones de Castro referidas al embargo norteamericano, a la cuestión religiosa en la isla, a la reciente liberación de disidentes políticos acordada con la Iglesia y con el canciller español y acerca de la reforma económica.