Con el fin de contener el desbordante déficit público y evitar la quiebra del Estado, el paquete del primer ministro Giorgos Papandreu prevé un ahorro de 78.000 millones de euros (110.000 millones de dólares) hasta 2015 mediante la suba de impuestos y la puesta en marcha de recortes, que seguramente se sumarán a la venta de empresas e inmuebles estatales. El ministro de Finanzas alemán, Wolfgang Schäuble, confirmó ayer que su país acordó los detalles de la participación de los inversores privados en el segundo paquete de rescate a Grecia. El aporte de las instituciones financieras germanas sumará 3200 millones de euros (4600 millones de dólares), apuntó Schäuble. “Estoy muy contento de que se hayan mostrado dispuestos a participar en este segundo paquete”, dijo el titular de la cartera. Josef Ackermann, presidente del Deutsche Bank, que sostuvo en conferencia de prensa que “Grecia dio un primer e importante paso. Estamos agradecidos por ello”. Los bancos alemanes tienen unos 10.000 millones de euros en bonos griegos. Junto con los franceses, se encuentran entre los mayores poseedores de deuda helena.