La caída del consumo, la inversión y el gasto público llevan a la economía española al borde de la recesión, confirmaron datos oficiales. El país registra en el cuarto trimestre de 2011 una caída trimestral del Producto Interior Bruto (PIB) del 0,3 por ciento, según datos de la contabilidad nacional publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE). La baja del PIB se debe a la contracción del consumo de los hogares, que a su vez se debe al alto desempleo de la población, del 22,85 por ciento. Tras la difusión de los números, el ministro de economía, Luis de Guindo, reconoció en el Congreso de los Diputados que el descenso del PIB “pone de manifiesto que no ha habido recuperación de la economía en ningún momento desde el inicio de la crisis”. De Guindos confirmó que los organismos internacionales pronostican un “empeoramiento” de la coyuntura española para este año y que se manifestará en “los indicadores del mercado laboral español”. Su “número dos”, Fernando Jiménez Latorre, admitió que Madrid estará en “recesión técnica” en el primer trimestre de 2012, al caer más del 0,3 por ciento.