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El mandatario encargado de Venezuela y aspirante presidencial, Nicolás Maduro, aseguró ayer que el gobierno va a evitar que se haga “cualquier locura” contra el candidato de la oposición, Henrique Capriles, e insistió en sus denuncias sobre supuestos planes de sectores de la ultraderecha de Estados Unidos. Durante la jornada, el gobierno norteamericano rechazó “categóricamente” que funcionarios de dos de sus organismos planeen asesinar al líder opositor. En medio de las declaraciones cruzadas entre el gobierno venezolano y el de Estados Unidos, Capriles acusó ayer a Maduro de ser el candidato de La Habana y dijo que de ganar los comicios presidenciales no enviará “ni una sola gota de petróleo” para financiar al gobierno cubano.

“Sabe ese candidato que tiene todas las garantías para hacer su campaña en libertad y que nosotros vamos a evitar cualquier locura contra él. Así lo garantizamos, pero pido conciencia y apoyo de todo el pueblo de Venezuela porque esta gente hace cálculos macabros”, indicó el mandatario encargado en un acto de organización de campaña. Maduro, candidato del oficialismo para las elecciones del 14 de abril, indicó que Capriles será protegido a través del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin), pero volvió a acusar a los ex embajadores estadounidenses Otto Reich y Roger Noriega de querer “hacerle algo” al candidato de la derecha para generar un escenario de violencia. “Lo he dicho con responsabilidad. Le he dicho al presidente Barack Obama, de los Estados Unidos, que hay factores en el Pentágono y la CIA... Si hiciera una investigación mínima verá que es así. Estoy diciendo la verdad absoluta porque tenemos los testimonios y la información directa de primera mano”, insistió Maduro.

Por su parte, el gobierno de Estados Unidos rechazó ayer las afirmaciones de Maduro. Lo hizo a través de la portavoz del Departamento de Estado, Victoria Nuland, quien tildó la acusación de “absurda” y desafió al candidato del oficialismo a presentar las “pruebas” que afirma tener. “Estados Unidos rechaza categóricamente las acusaciones de cualquier participación en cualquier trama para desestabilizar o dañar a nadie en Venezuela”, manifestó Nuland en su conferencia de prensa diaria. La vocera del Departamento de Estado agregó que, hasta donde ella sabía, el gobierno de Venezuela no transmitió ningún mensaje o petición formal al respecto a las autoridades de Estados Unidos.

En este contexto, Capriles tomó la palabra durante un acto político en el estado de Zulia. Allí dijo que Maduro es “el candidato de (el presidente cubano) Raúl Castro” y aseguró que el gobierno de La Habana sólo utiliza a los venezolanos y sus recursos para mantenerse en el poder. “Se va a acabar la regaladera a otros países. No va a ir ni una sola gota de petróleo más para financiar al gobierno de los Castro”, añadió.

El domingo, en el programa de televisión del ex vicepresidente José Vicente Rangel, Maduro aseguró que tenía “información de muy buena fuente” según la cual funcionarios del Pentágono y la CIA estadounidenses “están detrás de un plan” para asesinar a Capriles. “Le hago un llamado al presidente Barack Obama desde aquí, al gobierno de los Estados Unidos responsablemente”, dijo Maduro durante la entrevista. En esa ocasión, el candidato oficialista a la presidencia implicó en su acusación a Noriega y a Reich. “Niego categóricamente esta acusación absurda y desafío a Maduro para que presente las ‘pruebas’ que afirma tener”, escribió Reich el domingo en su cuenta de la red social Twitter y atribuyó esa “mentira maliciosa” a “una estrategia cubana dictada” al presidente interino. “Estos cargos están tan alejados de la realidad que bien puede ser una cortina de humo detrás de la cual el gobierno venezolano esté planeando eliminar a Capriles”, agregó Reich. En tanto, Noriega consideró que es “una acusación idiota”.