EL MUNDO › PERDIO LA GUERRA
La pistola humeante que conduce del 11-M al 11-S
En la investigación sobre los atentados del jueves en Madrid surgieron nuevas evidencias que apuntan a la autoría de la red Al-Qaida, según pudo constatar el enviado de Página/12.
Por R. K.
Desde Madrid
en España
La pista de Al-Qaida cobró ayer todavía más fuerza. Jamal Zougán, uno de los marroquíes detenidos, está sospechado de haber participado materialmente del ataque contra los trenes de Madrid y figura en los archivos marroquíes como uno de los líderes de la organización terrorista. Además, su nombre está registrado en la causa que lleva adelante el juez Baltasar Garzón que investiga las conexiones en España del atentado contra las Torres Gemelas. Otro de los detenidos, Mohamed Cahoui, también forma parte de ese expediente e incluso existe una escucha telefónica en la que dos dirigentes de Al-Qaida hablan de que deben establecer conexión con él. En las últimas horas, la pista de los detenidos pesa más en la investigación que el video en el que un hombre vestido con los hábitos islámicos reivindica el atentado. A esa cinta no se le prueba aún verosimilitud.
A lo largo de la jornada de ayer crecieron los rumores de que el gobierno español tuvo que abandonar la postura pública de que el atentado fue perpetrado por ETA no sólo porque la gente salió el sábado a la calle a denunciar la manipulación, sino también por presión de los gobiernos de Estados Unidos y Gran Bretaña. Lo concreto es que desde el anochecer del sábado la administración de Aznar dejó de hablar de ETA y anunció las detenciones de tres marroquíes, dos indios y dos españoles de origen indio que, según parece, ya estaban en la mira desde el viernes, pero, por razones electorales, se buscó demorar su detención.
Tal como anticipó Página/12, el grupo de marroquíes estaría relacionado también con una serie de ataques realizados en Casablanca en mayo del año pasado y en los que se utilizaron cinco suicidas y dos coches bomba contra la Casa de España, el Consulado de Bélgica, un hotel y una sinagoga. En total, mataron a 41 personas. Se trata de un grupo que se reivindica de Al-Qaida, aunque hay que tener en cuenta que actualmente la red creada por Osama bin Laden no es una organización típica, con dirigentes, cuadros medios y militantes que responden a una conducción, sino que se trata de grupos diseminados, con poca o ninguna conexión entre sí, pero que se consideran afines a la ideología y los métodos de Al-Qaida: fanatismo religioso extremo y la decisión de producir atentados contra Estados Unidos y sus socios.
La orientación de la pesquisa en dirección de los marroquíes llevará hoy a los investigadores españoles hacia Rabat, capital de Marruecos, y a especialistas marroquíes a Madrid. Extraoficialmente se deslizó que en los detenidos estaría la clave para atrapar al resto de los participantes en los atentados. Sin embargo, quedan enormes interrogantes sobre la matanza de los trenes.
u Cuántos hombres participaron. Según parece se trataría de un grupo reducido, tal vez de seis personas, que se subieron y bajaron de los trenes en la estación Alcalá de Henares, y dejaban en cada vagón la mochila con los explosivos.
u El atentado aparece como sofisticado en algunos aspectos. Por ejemplo, los detonadores marca Riodets son de partidas distintas, es decir que no fueron robados todos juntos sino que alguien los consiguió de a poco. El explosivo Goma 2 aparentemente no fue sustraído en España sino en otro país, tal vez árabe. Este aspecto del ataque mostraría una cierta logística.
u En contradicción con lo anterior, parece poco creíble que se haya podido descubrir el núcleo del atentado sólo siguiendo el rastro de la forma enque se compró uno de los celulares con los que se activaron las bombas. Según los investigadores, la clave estuvo en un pequeño negocio de reparación de aparatos móviles y ello da la impresión de que operó un grupo de inmigrantes fanatizados, pero improvisados.
u El otro dato que se conoció ayer fue que la camioneta Kangoo en la que se transportaron las mochilas explosivas fue robada cuando estaba estacionada, en el barrio madrileño de Cuatro Caminos –donde la comunidad de inmigrantes marroquíes es muy numerosa–. A la camioneta ni siquiera le cambiaron las chapas.
Lo que ayer perdió fuerza fue la adjudicación del atentado a través de un video dejado cerca de la mezquita de Madrid. Un hombre que dijo llamarse Abu Dujan al Afgani, vestido con ropas tradicionales árabes, aparece leyendo un texto en el que Al-Qaida sostiene que cometió el atentado como respuesta a la alianza de España con Estados Unidos y Gran Bretaña. El hombre, de acento marroquí, se presenta como portavoz militar de la red en Europa. Hasta anoche, la mayoría de los servicios de inteligencia descreían de esa reivindicación, en principio porque nadie tiene registrada la existencia de Dujan Al Afgani ni el cargo de portavoz militar y, además porque no incluye ningún dato categórico que deje en claro que es la organización que cometió los atentados. También se tomó en cuenta que Al-Qaida suele tardar mucho en reivindicar sus ataques y lo hace a través de comunicaciones a determinados medios árabes, aunque como se trata de células, ya no existe un solo modelo de reivindicación.