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Al verla, el parecido con el candidato es innegable. Longilínea y de modos suaves, Diana Kerry, hermana menor de John Kerry, vino a la Argentina por primera vez en el marco de una gira. Comenzó con un viaje en julio en México –la nación con el mayor número de norteamericanos expatriados: un millón– y luego por Canadá. En este segundo viaje, pasó por República Dominicana y llegará hoy a Costa Rica. Su misión: concientizar de la necesidad del voto a los norteamericanos que viven fuera de Estados Unidos. A menos de tres meses de los comicios, Diana explica en esta entrevista exclusiva con Página/12 que los votos del exterior incidieron en la elección de Bush en Florida. Dice una frase repetida en la convención demócrata: todo voto cuenta.
–Usted eligió la Argentina en su campaña por el voto de expatriados. ¿Conoce nuestro país?
–Vine porque hay alrededor de 30 mil ciudadanos norteamericanos, o incluso algunos más, y muchos desconocen que tienen el derecho a votar en esta elección. Debo dejar en claro este mensaje: tienen que enviar ahora sus pedidos de registro hasta el 15 de septiembre (tenemos un website www.overseasvote2004.com para los envíos). Conozco poco de Argentina, en esta visita estoy aprendiendo, pero no soy la voz oficial. Soy la hermana del candidato.
–Pero debe saber algo de los planes en política exterior hacia la región.
–Mi hermano va a llevar a Estados Unidos a trabajar dentro de la comunidad de naciones. Eso significa un acercamiento multilateral y de cooperación para resolver los problemas de todos los países en el mundo. Por supuesto que John está interesado en este lado del hemisferio.
–Me refiero, por ejemplo, a qué posición tomará respecto de la deuda externa argentina.
–Insisto, estoy aquí como su hermana. Sé que John está preocupado por tratar los problemas y mejorar la situación de todos, pero no sé exactamente qué hará. Es una política complicada y soy una maestra de escuela, alguien que ayuda a su hermano. Esta elección es muy importante para mi país, su país y el mundo y quiero llamar a que se ejerza el voto, hemos aprendido de la elección pasada que cada voto cuenta. En Florida dicen que fueron los votos del exterior los que hicieron la diferencia en la elección de Bush. Esta vez queremos que la mayoría vaya para John Kerry.
–¿Cuántos votos externos cree que Kerry podría obtener?
–Hay al menos 5 millones de ciudadanos norteamericanos que viven fuera de Estados Unidos. La mayoría ve cómo han declinado las buenas relaciones con el mundo; creo que van a votar por un cambio de liderazgo y dirección política. La actual administración no tiene planes para resolver temas como educación, salud, empleo, medio ambiente. Verán la diferencia con nosotros.
–¿Cuáles son los principales países en los que los expatriados podrían incidir en la elección?
–En México hay un millón, en Canadá hay poco más de medio millón. Además Gran Bretaña y Alemania tienen muchos norteamericanos que trabajan allí. Creo que República Dominicana es décimo en la lista.
–Si pudiera sintetizar tres razones para que los votantes que viven afuera voten a su fraterno en estas elecciones.
–La inversión en la gente, respeto internacional y el fortalecimiento de los EE.UU.
–¿Qué tipo de situación es la de las fuerzas del ejército norteamericano en ultramar? ¿Están llamando a votar a los soldados?
–La tradición es que las bases se aseguren de que los soldados se registren. Yo creo que este año será diferente. Las tropas no reciben un trato adecuado por las políticas de esta administración. Gente que no es bien tratada cuando regresa a casa; Kerry tiene el compromiso con ellos.
–¿Qué puede decir del grupo Veteranos por la Verdad, ex combatientes de Vietnam que han lanzado anuncios dudando de las condecoraciones de Kerry?
–No son un grupo de la verdad. Los veteranos que dicen la verdad son los que acompañaron en la lancha a mi hermano y estuvieron con él (unos 1000) y me dijeron a mí que lo respaldan. Este ataque contra John es parte de un patrón de hacer política de los republicanos –lo hemos visto antes–. Es porque no pueden hablar de las promesas incumplidas de Bush. Es un método deshonesto que no hace bien a los norteamericanos. Y así no se habla de lo importante.
–¿Los demócratas temen que haya fraude?
–Somos conscientes de lo imperfecto del sistema electoral. Trabajamos duro –un grupo de abogados voluntarios en cada estado– para asegurarnos la transparencia.
–En EE.UU. algunos presidentes (por ejemplo el mismo Bush) se ponen el maquillaje de persona común. John Kerry representa a un hombre sofisticado, de la aristocracia de la Costa Este. ¿Es eso un obstáculo?
–Vimos en la campaña de las primarias demócratas que Kerry tuvo éxito en todo el país y creo que tendrá éxito en toda la campaña. Cuando la gente entiende sobre el futuro de las familias y del país se da cuenta que él es el hombre indicado. Es un hombre que escucha, que no desea el privilegio de pocos. Cuando éramos niños John se disfrazaba de Robin Hood; a él siempre le gustaron las historias de héroes.
–Un sondeo difundido ayer por Los Angeles Times le dio una intención de voto mayor a Bush (49 por ciento a 46 para Kerry). En el último tiempo los sondeos dan un empate técnico. ¿A qué le atribuye la tendencia?
–Los números suben y bajan. El único sondeo que vale la pena es el del 2 de noviembre, día electoral. Además, estamos en la víspera de la convención republicana (comienza el lunes) y los focos están sobre Bush. Estoy confiada en que el voto será por el cambio.
–¿Cuál es la estrategia con la mayor minoría, los latinos?
–Mejor educación, empleo, servicio de salud. La actual administración sólo les habla en actos proselitistas. Esta administración les cortó los impuestos a los más ricos, los que menos necesitaban; le cortó el presupuesto del Estado a la educación, la salud, todos los servicios sociales. Los latinos, todos los norteamericanos lo ven.
–¿Cuáles serán las políticas económicas?
–Lo primero que hará será poner fin a los cortes de impuestos de los ricos. Asegurarnos de invertir en la gente. Hacer a EE.UU. más fuerte, brindando seguros sociales. En los años 90 él apoyó un presupuesto balanceado. Cuando Bush hijo llegó a la Casa Blanca teníamos superávit, y ahora, luego de tres años, hay un déficit público histórico.
–¿Podría contradecir la política de libre comercio a la que es favorable Kerry con los intereses de los trabajadores en Estados Unidos?
–Mi hermano está a favor de llevar a cabo tratos de libre comercio que beneficien a los trabajadores en casa. Los trabajadores entenderán que las negociaciones traerán beneficios.
–¿Qué piensan hacer con Irak? Kerry ha hablado sobre la internacionalización del conflicto...
–John pondrá atención en resolver este problema, así como la situación conflictiva entre los israelíes y palestinos. La actual administración fue negligente con Irak y Medio Oriente: nunca tuvieron planes de paz, tampoco los tienen ahora. Decir lo que Kerry haría sería inapropiado, porque recién podría tratar el tema el próximo enero.
–¿Por qué John Kerry se opuso al repliegue de tropas de Asia y Europa por diez años, un anuncio hecho por Bush últimamente? Incluso Alemania, la más afectada, estuvo de acuerdo.
–No tuve oportunidad de discutir este tipo de asuntos con John. El debe creer mejor mantener la fuerza en los principales teatros de operaciones.