EL MUNDO › BUSH SE IMPONIA ANOCHE CONTRA JOHN FORBES KERRY EN LA ELECCION MAS PELEADA DE EEUU
El avance del señor de la guerra contra JFK
Con la mayoría de los votos escrutados George W. Bush se imponía anoche en unas elecciones norteamericanas que habrían marcado un record de participacion popular. Crónica de un día de lucha y suspenso y los análisis del Estados Unidos y el mundo que se vienen.
Fue una larga noche de suspenso, al cabo de la cual proyecciones mostraban que EE.UU. había votado a favor de la guerra contra el terrorismo. Y que el "presidente de la guerra", George W. Bush, resultaría reelegido para seguir al frente de un país a la ofensiva por cuatro años más. En una de las elecciones más reñidas y con mayor nivel de participación, Bush se llevaba anoche 237 electores de los 270 necesarios para ganar, contra los 188 adjudicados al candidato demócrata John Kerry, según los últimos cálculos de la cadena televisiva CNN.
Bush parecía asegurarse ayer cuatro años más en la Casa Blanca, a pesar de que una temprana proyección de la encuestadora Zogby había adjudicado al candidato Kerry el triunfo con 311 electores contra 213 para el presidente Bush. Según un analista de la cadena televisiva Sky 24, Bush sacó una ventaja de 10 puntos entre los blancos, mientras que Kerry atrajo al 90 por ciento de los votantes afronorteamericanos y el 63 por ciento entre los hispanos y los asiáticos. Ciento cincuenta y seis millones de estadounidenses votaron por su presidente. En una de las elecciones con un nivel de participación que podría superar el record de 63,1 por ciento alcanzado en 1960, las grandes filas de votantes que esperaban, con demoras de hasta tres horas en estados vacilantes y decisivos como Ohio, no desalentaron a muchos de los votantes primerizos.
Como se preveía, Bush ganó en Georgia (15 electores), Indiana (11), Kentucky (8), Virginia Occidental (5), Alabama (9), Oklahoma (7), Tennessee (11), Carolina del Norte (15), Carolina del Sur (8) Missisipi (6), Dakota del Norte (3) y Dakota del Sur (3). El presidente también triunfó en Misouri (11 electores), Colorado, Nebraska (5), Kansas (6), Texas (34), Wyoming (3), Luisiana (9), Utah (5), Arkansas (6) e Idaho (4), además de Virginia (13), que figuraba entre los estados indecisos.
Por su parte, como también anticipaban los sondeos, Kerry ganó en Vermont (3 electores), Connecticut (7), distrito federal de Columbia (3), Delaware (3), Illinois (21), Massachusetts (12), Maryland (10), Maine (3 de 4 electores en juego, con el restante en duda), Nueva Jersey (15), Nueva York (31), Rhode Island (4), Pennsylvania (21), otro de los estados clave, y California (35). Todos los estados ya con proyecciones mantenían las mismas preferencias que en las elecciones de 2000, y Arizona e incluso Florida quedaban en manos de Bush, luego de arduos conteos. Kerry se alzó con los 21 electores del estado oscilante de Pennsylvania. En Ohio, uno de los estados indecisos clave, Bush se perfilaba como vencedor.
Más de un oriundo de Ohio debe haberse sorprendido ayer cuando al levantar el tubo del teléfono escuchó la voz del presidente de su país exhortándolo a votar por él. Desconfiado, alguno que otro habrá cortado pensando que otra vez las grabaciones proselitistas lo acosaban. Pero no, se trataba realmente de Bush, que hizo un puñado de llamados para conseguir votantes, en uno de los estados que amenazaba con ser tan conflictivo como Florida en 2000.
"Es increíble la cantidad de gente que hay en esta fila. No quería creerlo cuando decían que habría una tasa de participación record", afirmó Shelley Orwick, de 24 años, mientras observaba la escena en un distrito del oeste de Columbus, la capital estatal. "Siempre lo dicen y nunca ocurre", agregó esta votante del candidato demócrata John Kerry, contenta de ver las largas filas. La mayoría de los votantes soportaron la espera con paciencia y esperanza de un rápido y limpio final electoral tras varios meses de campaña. "Vale la pena esperar", dijo Robert Schmelling, de 35 años, un funcionario del gobierno local que votó por la reelección del presidente Bush. "Espero que esto no termine en los tribunales", agregó, en alusión a los comicios presidenciales de 2000, cuando luego de 36 días de caos electoral un fallo de la Corte Suprema definió el resultado en favor de Bush. Para Cindy Dequenne, de 32 años, la elección era una cuestión de familia, ya que algunos de sus familiares han estado combatiendo en Irak. "Kerry me da miedo. Tengo temor que sea elegido y por eso estoy aquí", dijo esta enfermera.
A diferencia de Argentina, en EE.UU. no existe la veda electoral, con lo cual, durante todo el día de ayer, los partidarios republicanos o demócratas asediaron a los votantes ya extenuados con su nuevo papel electoral: comprender las máquinas de visor óptico, o las perforadoras, las papeletas, y hasta desilusiones ante la ruptura de alguna que otra máquina. "No se han registrado problemas, a excepción de que las filas son largas. Sobre todo, lo que se observa es una gran motivación y un gran número de votantes", dijo Manuel Antonio Garreton Merino, uno de los observadores internacionales de la organización Global Exchange. Agregó: "Es como si las personas estuvieran diciendo "no vamos a dejar que vuelva a suceder"", refiriéndose al caos de Florida en 2000. Pero si no hubo caos, el resultado pareció ser el mismo.