EL MUNDO › LOS MANUSCRITOS DE PINOCHET DE SUS TRANSACCIONES FINANCIERAS
Cuando sumaba verdes no estaba loco
En el marco de la investigación de las cuentas millonarias del ex dictador Augusto Pinochet, descubrieron pruebas que lo complican. La defensa apela a la “insania” del Pinochet, pero esto prueba lo contrario. Ayer se conoció una nueva querella contra él por el asesinato de un opositor.
El asesino millonario dejó las pruebas escritas de su propio puño y letra. Augusto Pinochet dejó evidencias de los movimientos financieros en sus cuentas secretas del Riggs Bank de Estados Unidos, incluidas notas manuscritas con instrucciones de pago, reveló la cadena de noticias 24 Horas, en Santiago. En este marco, el juez Sergio Muñoz estudia ampliar la investigación sobre las cuentas secretas en el Riggs, mientras que el albacea del ex dictador anunció su renuncia a ese cargo. Una nueva querella se presentó contra Pinochet por el secuestro y asesinato de un militante opositor en 1981. Y la Corte de Apelaciones de Santiago inició ayer el estudio de una petición de la Justicia argentina para privar al ex hombre fuerte chileno de su fuero por el asesinato en Buenos Aires del general Carlos Prats, informó el tribunal.
Uno de los documentos encontrados incluye una aclaración de los ejecutivos del Riggs, según la cual parte de los fondos del ex dictador provenía de comisiones, pagos y honorarios por proyectos secretos, en especial de tipo militar, realizados fuera de Chile. Entre los proyectos militares que rindieron presuntas coimas a Pinochet figura al parecer el fallido Cohete Rayo, en conjunto con una compañía británica, y en el que Chile invirtió más de 66 millones de dólares. El diputado democristiano Jorge Burgos explicó que, además de las presuntas comisiones ilegales, el proyecto Cohete Rayo debe ser investigado como “el peor negocio del Ejército de Chile”. En tanto, el juez Sergio Muñoz estudia ampliar la investigación al resto de la familia por evasión fiscal sobre las cuentas de Pinochet descubiertas en el Riggs, informaron fuentes judiciales chilenas citadas por la prensa. El hijo mayor de Pinochet, Marco Antonio, sostuvo que el dinero que recibía su familia proveniente de las cuentas descubiertas en el Riggs “está en el marco de la legalidad”, ya que fue entregado como “adelanto de herencia”.
El hijo del ex dictador confirmó además que el abogado Oscar Aitken renunció a seguir siendo albacea, como lo había anticipado Augusto Pinochet hace dos semanas. Según el diario El Mercurio, el administrador de la fortuna del general, que según estimaciones judiciales podría superar los 15 millones de dólares, dejó su funciones hace dos semanas por el perjuicio profesional que le estaba acarreando esa tarea. La imposibilidad de disponer de los dineros, embargados por el juez Sergio Muñoz –que investiga las cuentas secretas– sería otra de las causas de la renuncia. Muñoz incautó en septiembre pasado bienes por seis millones de dólares de Pinochet, para responder ante un posible fraude tributario, y amplió su investigación a las propiedades de la familia del ex dictador y su albacea. Aitken administraba los anticipos mensuales de la herencia que Pinochet, de 89 años, entregaba a su esposa, Lucía Hiriart, y a sus cinco hijos, por un monto total superior al medio millón de dólares. Sin embargo, desde el hallazgo de las cuentas secretas del Riggs suspendió las entregas mensuales de dinero, lo que habría generado tensiones con la familia Pinochet. El abogado comenzó sus funciones de albacea en octubre de 2002, cuando Pinochet cerró las cuentas que mantenía en secreto en el Riggs Bank de Washington desde 1994.
Paralelamente, se conoció una nueva querella contra Pinochet y la Central Nacional de Informaciones (CNI) por el secuestro, torturas y homicidio calificado de Luis Pincheira, militante del Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR). Según dijo el abogado Hiram Villagra, Pincheira fue detenido en octubre de 1981 por agentes de la CNI en Talca, 240 kilómetros al sur de la capital, trasladado a Santiago y, tras un mes de estar desaparecido, fue dado por muerto. La versión oficial de la época indicó que había caído en un enfrentamiento con las fuerzas de seguridad, tras un tiroteo y el incendio del vehículo en que viajaban cuatro miembros del MIR. “Recientemente, un ex agente de la CNI reveló que participó en esas cuatro detenciones en la zona de Talca. Eran cuatro personas que estaban clandestinas en Chile, que estaban ilegales y jamás fue reconocida su detención hasta que decidieron ejecutarlos”, dijo Villagra. Pinochet aguarda el fallo de la Corte Suprema, que debe anular o ratificar la orden de arresto dictada en su contra por los crímenes de la Operación Cóndor. El juez a cargo del proceso, Juan Guzmán Tapia, inculpó al ex dictador por su responsabilidad en un asesinato y nueve secuestros atribuidos a ese plan, consistente en la coordinación de las dictaduras del Cono Sur en los años setenta para exterminar a opositores. El tribunal chileno informó que entregará su decisión inapelable y definitiva después del próximo 2 de enero.
Pinochet perdió sus fueros en la causa Prats, pero sólo a los efectos del juicio que tiene en sus manos el juez chileno Alejandro Solís. La nueva petición de desafuero, que la Corte seguirá examinando la próxima semana, fue planteada por la jueza argentina María Servini de Cubría, en un proceso paralelo por el asesinato del general Prats, ex comandante en jefe del ejército chileno, y su esposa, Sofía Cuthbert. El abogado Ambrosio Rodríguez, miembro del equipo jurídico que defiende a Pinochet, sostuvo que este segundo desafuero por el mismo delito “es improcedente”, porque existiendo una investigación en Chile “esta otra causa debe ser rechazada”. La jueza Servini de Cubría pidió el desafuero para interrogar en Chile a Pinochet y establecer su responsabilidad en la muerte del matrimonio Prats, cuando una bomba estalló bajo su automóvil el 30 de septiembre de 1974.