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Será una segunda vuelta entre derecha y más derecha. Ninguno de los siete candidatos en las elecciones iraníes celebradas el viernes ha alcanzado el 50 por ciento de los votos, por lo que habrá segunda vuelta el próximo día 24, anunció ayer el portavoz del Consejo de Guardianes, Gholamhusein Elhom. Con dos tercios de las papeletas escrutadas, el conservador Hachemi Rafsanjani, siempre visto como favorito, obtuvo sólo un 20,84 por ciento de los votos. Rafsanjani, que ya fue presidente durante dos mandatos (1989-97), es seguido por el representante de la línea dura, Mahmud Ahmadineyad, el alcalde de Teherán (foto), que consiguió el 19,71 por ciento de las papeletas. La tercera posición la ocupa el clérigo Mahdi Karubi, afín al “líder supremo” iraní, el ayatola Ali Jamenei, con algo más del 17 por ciento de los sufragios. Esta será la primera vez en la historia de la República Islámica, fundada en la revolución de 1979 contra el Sha, que es necesaria la celebración de una segunda vuelta en los comicios presidenciales. El candidato reformista Mustafa Moin quedó muy atrás en estos paradójicos comicios donde todos los conservadores prometieron reformas.