EL MUNDO
Marcos se pone en alerta
El Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) anunció ayer que prepara un nuevo paso en su lucha que “implica arriesgarse a perder lo logrado” y a que se agudicen “la persecución y el hostigamiento” contra las comunidades bajo su órbita. La guerrilla zapatista en el estado mexicano de Chiapas (sudeste) provocó especulaciones luego de anunciar el lunes un “alerta roja” y la movilización de sus simpatizantes, sin dar razones para la medida. “Han sido llamados a filas todos los elementos de nuestro EZLN que se encontraban haciendo labor social en las comunidades zapatistas y han sido acuarteladas nuestras tropas regulares”, indicó el comunicado. En algunos de los pueblos de la región, como Oventic, a pocos kilómetros de San Cristóbal de las Casas, aparecía ayer un pequeño cartel, en el que se anunciaba simplemente: “Cerrado por alerta roja”. Pero, en la propia San Cristóbal (invadida por los zapatistas el 1º de enero de 1994) reinaba la calma, y no se vislumbraba ningún movimiento especial de fuerzas policiales o del ejército a primera hora de ayer. El gobierno afirmó que las zonas de (los) Altos de Chiapas “se encuentran en total normalidad”.