Las elecciones para renovar el Parlamento Europeo empezaron ayer en dos países, Gran Bretaña y Holanda, y continuarán en el resto el próximo domingo. Después de Holanda e Inglaterra el sábado votarán los irlandeses, los checos, letones, los eslovacos, los malteses y los chipriotas. Diecinueve de los 27 países de la Unión Europea (UE) –entre ellos Alemania, Francia, España, Italia y Polonia– irán a las urnas el domingo. Un total 388 millones de electores elegirán a los 736 Eurodiputados en una consulta que tiene tres constantes que se vienen precisando desde hace varios meses: el retroceso de los partidos socialdemócratas, el progreso de la extrema derecha y la amenaza de una abstención copiosa. En Francia, por primera vez en muchos anos, la derecha gobernante adelanta en las intenciones de voto al Partido Socialista. Una muestra de lo que podría ocurrir de aquí al domingo proviene de Holanda. El Partido por la Libertad, del diputado de extrema derecha Geert Wilders, obtuvo el 14,8% de los votos, o sea cuatro escaños.