EL MUNDO › PREPARATIVOS BELICOS EN EL KURDISTAN IRAQUI
Tres pistas para la acción
Por Michael Howard y Luke Harding*
Desde el Kurdistán iraquí
Ingenieros en la región del norte de Irak controlada por los kurdos están reacondicionando pistas aéreas para transformarlas en elementos fundamentales de la red de apoyo logístico y de emergencia para la planeada ofensiva aérea y terrestre contra las fuerzas iraquíes hacia el sur. Como parte de los preparativos norteamericanos para la campaña para derrocar a Saddam Hussein, observadores militares estadounidenses en el Kurdistán iraquí, donde Bagdad perdió el control en 1991, han estado trabajando en tres pistas: Bermani, al norte de la región autónoma, Harir en el centro y Sulaymaniyah en el este.
Las pistas, que fueron visitadas la semana pasada por este diario, forman parte de la rudimentaria infraestructura de aviación en el Kurdistán, que en parte data del mandato británico en Irak en los años ‘20. Fuentes cercanas al liderazgo kurdo afirmaron que Estados Unidos también instalará pronto sistemas de misiles Patriot para proteger las pistas en Harir y Sulaymaniyah. Los principales focos de atención giran en torno de la pista de Bani Harir, a 40 kilómetros al norte de Irbil, y la pista de Bakrajo cerca de la ciudad de Sulaymaniyah.
Se espera que la pista de Harir sea destinada a la ayuda humanitaria, pero también podrá funcionar como uno de los puestos centrales para las tropas norteamericanas que ingresen a la zona controlada por Bagdad. La pista es claramente visible desde la ruta. La cinta asfáltica ha sido limpiada y ya se han pintado las marcas. Hace dos semanas, según un testigo, un avión de transporte C-130 aterrizó y descargó unos 30 vehículos. También hubo numerosas inspecciones no confirmadas de tropas norteamericanas.
La pista en Bermani, a 14,5 kilómetros de la frontera con Turquía, está controlada por las fuerzas turcas, que vigilan el movimiento de unos 5000 integrantes de la guerrilla del Partido de los Trabajadores del Kurdistán, que partieron hacia las montañas kurdas desde Turquía luego del arresto de su líder, Abdulá Ocalan. Construida por los iraquíes, la pista está en malas condiciones. Se utilizó por última vez en 1991 por aviones de alas fijas y se piensa que está siendo acondicionada para uso exclusivo de helicópteros. Su función principal sería la provisión de apoyo para el ejército turco en su plan para establecer una “zona colchón” a lo largo de su frontera con Irak.
Aún no hay signo de presencia militar aliada en la pista de Sulaymaniyah. Esta pista de 3,2 kilómetros está a menos de 56 kilómetros del frente de combate con tropas iraquíes, y a una corta distancia aérea de la ciudad petrolera de Kirkuk. Hace tres semanas que la Unión Patriótica del Kurdistán vigila la base. Desde entonces ha habido pocos signos de actividad, aunque recientemente soldados kurdos han restaurado la pista e instalaron luces para el aterrizaje. La pista es suficientemente larga para permitir el descenso de aviones de carga Hércules, así como también aviones de combate Jaguar y Tornado.
Pero la posición de esta pista está cómodamente al alcance de la artillería terrestre iraquí. Los expertos militares creen que la pista no será utilizada para operaciones ofensivas sino fundamentalmente como una base de provisiones adelantada. Una vez que comience la invasión a Irak, las tropas aliadas serían rápidamente desplegadas por helicóptero para asegurar las ciudades norteñas de Mosul y Kirkuk.
* De The Guardian de Gran Bretaña. Especial para Página/12.