Más delgada, bronceada y sonriente como hace mucho tiempo no se la veía, Elisa Carrió volvió a la vida política con una sentencia temeraria: “Hay que tener paciencia democrática y resistir toda forma de humillación, de brutalidad y de pérdida del derecho en la Argentina”. En el lanzamiento de su nuevo partido, la Coalición Cívica-ARI, Lilita fue única protagonista de un acto en el que advirtió sobre un posible golpe de Estado, aseguró que Néstor Kirchner “no tiene ni tendrá nunca más” legitimidad y elípticamente acusó al ex presidente Eduardo Duhalde, al vicepresidente Julio Cobos y al propio Kirchner de un intento desestabilizador. Rodeada por sus dirigentes más cercanos, la chaqueña también ratificó la vigencia del Acuerdo Cívico y Social, criticó a la ley de Servicios de Comunicación Audiovisual y denunció operaciones en su contra.

“Somos parte de una Argentina que sufre de humillación. Fueron humillados los pobres, los obreros, los pequeños y medianos empresarios, muchas veces fue humillado el campo... y ahora todos”, comenzó Carrió un discurso lleno de alegorías, acusaciones directas e indirectas, un poco de humor y hasta teoría política. “Y ya lo ve, y ya lo ve, es para Cobos que lo mira por tevé”, gritaron varias veces desde la tribuna del coqueto y moderno salón de la Capital Federal donde se realizó el lanzamiento. Una estridente y veloz música electrónica había acompañado un primer video con las consignas que representará este partido llamado a ser “la tercera fuerza nacional”.

Durante los primeros minutos, Carrió recorrió la historia de los golpes de Estado a presidentes constitucionales como Perón, Frondizi, Illia, Isabel Martínez, en los cuales “muchos creyeron que esos gobiernos eran insoportables”. Después de esa afirmación remarcó la necesidad de “tener la paciencia para salir al futuro y no regresar a lo peor de nuestro pasado”. “Nosotros no vamos a tener la desesperación de quienes después de haber construido los monstruos, haber acompañado a los monstruos, ahora se desesperan porque existen los monstruos”, completó. En clave Carrió, le apuntó al ex presidente Eduardo Duhalde considerándolo algo así como “el padre de la criatura” y al vicepresidente por formar parte del Gobierno.

Sobre el final de su discurso, Lilita aseguró que “no es momento para hablar de candidaturas” y pidió que “no le crean a nadie” que diga que ellos rompen en ACyS. “Lo que estamos haciendo es manejar el timón para que los que quieran romper no puedan”, explicó. Por lo bajo, altos dirigentes de la nueva CC insistían en que no existe el más mínimo lugar para que Carrió y Cobos compartan un mismo espacio. “El acuerdo no lo va a conducir nunca alguien que forma parte del gobierno kirchnerista”, se sinceraban.

Mientras tanto, Carrió cuestionó la ley de medios audiovisuales porque, según dijo, apunta a que el oficialismo se “apropie” de “todos los medios de la Argentina”. “Están equivocados quienes creen que Kirchner quiere tener periodistas para cambiar a la gente, porque la opinión ya cambió y para siempre”, decretó. La diputada electa volvió a pedir “paciencia” para que quienes “hacen desastres sean responsables”, habló de estrategia y de táctica y vaticinó acuerdos parlamentarios con otros sectores de la oposición con quienes nunca haría una alianza electoral.

“Desde este lugar, pero no siendo cómplices, les digo que somos la garantía para salir de la peor degradación democrática”, concluyó.

Por la mañana el ARI, la fuerza madre del nuevo partido, realizó un congreso nacional en el que se aprobaron las modificaciones a su Carta Orgánica y se nombraron doce autoridades provisorias hasta tanto se realice el proceso de afiliación y de votación. La presidenta es Lilita y la acompañan Adrián Pérez, Carlos López Iglesias, Gerardo Conte Grand, María Eugenia Estenssoro y Alfonso Prat Gay, entre otros.

Pero esa reestructuración “modernizante” dejará en el camino a varios dirigentes. La primera es la líder de GEN, Margarita Stolbizer. También quedaron afuera Unión por Todos, de Patricia Bullrich, y el grupo radical Forja, conducido por Enrique Olivera. Pero a diferencia de Stolbizer, Bullrich y Olivera continuarán trabajando junto a Carrió en una especie de “confederación” que los involucrará como extrapartidarios.

El acto de ayer tuvo un párrafo aparte para las adhesiones. Por un lado la de su principal socio político, el titular de la UCR Gerardo Morales y por el otro de Bullrich y Olivera, que estuvieron presentes. Más allá de la ausencia de Stolbizer, Carrió y varios dirigentes remarcaron en varias oportunidades la presencia de los diputados de GEN Juan Carlos Morán y Francisco Ferro, entre otros referentes de aquel espacio. Desde el GEN aclararon que lo hicieron de manera “personal” y no orgánica.