EL PAíS › EL 13 DE DICIEMBRE SE REUNE EL CONGRESO DEL PJ
El fin de la elección interna
Por Diego Schurman
El justicialismo realizará el 13 de diciembre un nuevo congreso partidario para suspender la fecha de las elecciones internas. Así lo confirmaron a Página/12 fuentes del Gobierno que anoche ultimaba los detalles de la nueva convocatoria. Probablemente en la cumbre se fije un nuevo día para el comicio –se habla del 23 de febrero o principios de marzo–, aunque nadie descarta que directamente se mocione una alternativa a la ley de lemas para evitar la puja.
Lo que aún no pudo confirmar el Gobierno es el lugar del encuentro. Primaba la idea de organizarlo en Obras Sanitarias, pero las autoridades del club informaron que para el viernes 13 ya se habían asumido compromisos para realizar actividades deportivas. Por eso en la Casa Rosada estudiaban la posibilidad de llevar adelante la cumbre en Costa Salguero. De fracasar el intento no descartaron incluso adelantar el congreso partidario para el miércoles 11, ahora sí en el microestadio de Obras.
La reunión de los congresales, la tercera en poco más un mes, tendrá como principal objetivo borrar de un plumazo lo acordado en el anterior: la realización de internas partidarias el 19 de enero.
El resto de la agenda de la cumbre, que está hegemonizada por el duhaldismo, persiste en el más profundo misterio, básicamente porque en Gobierno aún no han encontrado un candidato que haga la diferencia.
La cruzada por convencer a Carlos Reutemann sigue vigente como el primer día. El Lole es para los hombres de Eduardo Duhalde el único dirigente que puede hacer la diferencia sobre el resto de los candidatos, tanto de los más afines al Gobierno, como Néstor Kirchner y José Manuel de la Sota, como de los alejados, como Carlos Menem y Adolfo Rodríguez Saá.
Las dudas del gobernador de Santa Fe potencian las del propio Duhalde, quien se encuentra en un callejón sin salida: hoy por hoy Menem tiene grandes chances de vencer a Kirchner y De la Sota en una interna. Al menos así lo demuestran las encuestas que maneja. Rodríguez Saá también tiene grandes chances, aunque en su caso se especula que no competirá por dentro de la estructura partidaria.
En ese marco, son muchos los que apuestan por la “variante Romero”, de tal manera que en las elecciones generales del 27 de abril todos los candidatos del PJ compitan con los del resto de los partidos. Según la propuesta de Juan Carlos Romero –de la que se debe estar arrepintiendo ya que Menem, su compañero de fórmula, la rechaza–, si cualquiera de los postulantes del PJ gana o queda segundo, el resto de los candidatos se comprometen a votarlo en el ballottage.
Todo será materia de debate en el congreso del viernes 13. Para esa cumbre el Gobierno también mira atentamente lo que sucede en Tucumán, donde la estabilidad del gobernador Julio Miranda pende de un hilo. Duhalde necesita tanto de él como del resto de los mandatarios provinciales para garantizar que lo que se proponga en la cumbre partidaria no encuentre ningún obstáculo.
“Si trastabilla Miranda se podría producir un efecto cascada sobre Fellner, Insfrán y Rovira y no habrá forma de contener a los congresales de sus provincias”, alertó a Página/12 un funcionario de la Casa Rosada, en alusión a los gobernadores de Jujuy, Formosa y Misiones.
Curiosamente la voz de alerta no fue dirigida hacia la oposición interna, representada en muchos casos por el menemismo, sino hacia los propios funcionarios del Gobierno. En especial, se mencionó a Nélida “Chichi” Doga. La ministra de Desarrollo Social había dicho días atrás que los políticos “en vez de contar los votos van a contar los muertos”.