EL PAíS › EL SOCIALISTA ES CIUDADANO ILUSTRE DE LA PLATA
Honores a Felipe González
“Los cambios en las grandes naciones se producen generacionalmente. El futuro está en manos de los jóvenes, lo cual no garantiza que sea mejor. Dependerá de su capacidad de compromiso.” Así cerró el ex presidente del gobierno español Felipe González su discurso en el Salón Dorado de la Municipalidad de La Plata, luego de ser declarado “ciudadano ilustre y huésped de honor” de la ciudad. Presidieron el acto el intendente Julio Alak y el jefe de gabinete de la Procuración General de la Nación, Carlos Bettini Francese, quien se exilió en España luego del secuestro y desaparición de cuatro familiares entre 1976 y 1977, y allí entabló una amistad con González que se mantiene hasta hoy.
Los pasodobles de la banda del Regimiento 7 dieron la bienvenida al visitante. Lo esperaba una comitiva con las banderas de España y la verde y blanca de su Andalucía natal. González se abrió paso escoltado por Alak. Inmediatamente pasaron al despacho del jefe comunal, donde Antonio Carrizo leyó el decreto que distinguió a González con el máximo galardón de la ciudad. Joan Manuel Serrat es el único otro no platense que recibió este honor. Luego, el visitante habló en el Salón Dorado y rescató “la importancia de la política”. “El mercado y la democracia son una pareja muy extraña porque el señor mercado, cuando no le va bien la señora democracia, puede irse con cualquier Pinocha de turno”. El socialista reivindicó el lema “Otro mundo es posible” del Foro de Porto Alegre, aunque propuso matizarlo: “Este (mundo) en el que vivimos es manifiestamente mejorable”. Habló de la “legitimidad de origen que dan los votos” como “condición necesaria pero no suficiente” para una buena gestión, y propuso añadirle “la legitimación del ejercicio a través de la acción de gobierno”. Tras señalar que militar en una ONG “no da de por sí un proyecto político”, pidió a los jóvenes que se involucren porque “los registros más nobles e innobles del ser humano” los da la política.
Tras una rápida visita a la casa de la familia Bettini-Francese, convertida en museo histórico y actual sede de la Secretaría de Derechos Humanos de la Gobernación bonaerense, González fue a la Casa de Gobierno donde comió y habló largamente con Alak y Felipe Solá. Hoy será recibido por el presidente Néstor Kirchner y participará de un seminario del PNUD sobre el desarrollo democrático en Latinoamérica.
Informe: Mariano Roca.